inmi gración, pros y contras. Un proyecto colectivo.

Propongo un debate sobre la inmi gración no basado en un intercambio de opiniones con poco fundamento que no lleva a nada, como hemos visto por cientos en este foro, sino en el examen de los datos objetivos a nuestro alcance. Determinemos por fin qué aportan los pagapensiones y qué nos cuestan.

Comencemos intentando entre todos averiguar cuál es el coste económico real total para los españoles de los 6 millones de pagapensiones que tenemos. También una aproximación a los impuestos que pagan para comparar ambas cifras y dilucidar si realmente aportan algo económicamente (pagan pensiones etc.) o son una carga. Iré añadiendo al post las aportaciones que hagáis. Si queréis luego seguiremos con otro tipo de aspectos no económicos.


Apartado Gastos:

1ª: Cárceles. El 60% de los presos encarcelados en la última década son extranjeros. Hay 25.966 pagapensiones en prisión y el coste medio de un preso es de 78,29 euros al día.

Esto nos da un coste anual de 742.000.521,1 euros.

Es de los menores comparados con otros gastos que nos suponen pero tiene un especial valor moral.

2ª: Escolarización pagada por las arcas públicas. El coste de un año de escolarización es de unos 5000 euros en el colegio. 8000 en la universidad. En el curso 2007/08 en España había 695.190 extranjeros escolarizados. Pongamos un coste medio de colegio, instituto y universidad de 6000 euros al año.

Esto no da un coste anual de 4.171.140.000 euros.

3ª: Sanidad pagada por las arcas públicas. El gasto sanitario por habitante en España es de 1.329 euros (Gasto sanitario por habitante). No sé cómo está calculado porque en mi comunidad autónoma (no es de las más ricas) he dividido el presupuesto del servicio de salud entre el número de habitantes y son 2300 euros al año por persona, los datos oficiales de esta misma comunidad dicen que es de 1.346. No sé dónde está la diferencia pero vamos, como estoy haciendo todo el rato, a escoger el dato más favorable para la postura pro-inmi gración. 1329 euros por persona.

Añado que alguien me ha hecho notar (Ignatius) que ciertos estudios hablan de que los pagapensiones tienen un gasto sanitario menor porque entre ellos hay pocos viejos. Si bien esto puede ser cierto no considero que deba cambiar el cálculo porque esos pagapensiones llegarán a viejos y el gasto medio a lo largo de su vida será el mismo que el de los demás. Además un inmigrante que haya llegado aquí con 35 años empieza a pagar impuestos a esa edad, y durante los 17 años que van de los 18 a los 35, en los cuales su gasto sanitario en relación a los impuestos pagados habría sido menor no ha estado pagando aquí, así que incluso se le podría dar la vuelta al argumento, pero dejémoslo así.

Esto nos da un coste anual de 7.974.000.000 euros.

4ª: Aquí voy a intentar cuantificar en total de subsidios y ayudas que reciben, va ser difícil por la opacidad que por motivos ideológicos hay al respecto, la ayuda será bienvenida. Intentemos al menos conseguir una aproximación.

5ª: Intangibles. Aquí voy a incluir cuestiones que no se pueden, o es difícil, cuantificar económicamente:

- El coste económico de mantener en la guandoca a 25.966 pagapensiones es de 742.000.521 euros al año. Pero no podemos cuantificar el "coste" no económico de los delitos por los que están en la guandoca, es decir, nos cuestan 742 millones al año más los robos que han cometido, las palizas que han dado, las chicas que han violado, la gente que han dado de baja de la suscripción de la vita, la inseguridad y el miedo que han creado etc.

- La masificación. España tiene unos metros cuadrado finitos, con cada persona que entra al país disfrutamos de menos montes, menos playas, menos parques naturales, menos aguas pesqueras, menos recursos naturales, menos ingresos del turismo (que funcionan económicamente como un recurso natural) menos aire puro, etc. por persona. Además hay una serie de infraestructuras pagadas por generaciones anteriores de españoles que se comparten con quien entra aquí con un coste de 0 para él, sólo su mantenimiento.

- Las que se nos vayan ocurriendo las pondré aquí.


COSTE TOTAL PROVISIONAL: 12.887.140.521 euros + intangibles. De momento 12.900 millones de euros al año nos cuestan los pagapensiones, aún faltan muchas cosas por añadir y hay que restar lo que aporten.


Apartado aportaciones:

1ª Sólo 1.8 millones de los 6 millones de pagapensiones trabaja. Su salario medio neto es de 10.526 anuales, según datos de la Agencia Tributaria (pagapensiones EN ESPAÑA: La crisis eleva la brecha salarial entre nacionales y extranjeros). Para cobrar 10526 netos hay que cobrar 11354 brutos (suponiendo que fueran solteros, si estuvieran casados pagarían menos, lo contabilizo así porque en las simplificaciones siempre asumo la elección más favorable a las posturas pro-inmigranción).

Como vemos con estos salarios apenas se pagan impuestos. Además, si tienen hijos, muchos de ellos le serán devueltos en la declaración de la renta, pero esto no lo voy a contabilizar de momento. Pagan 828 euros de impuestos directos al año. Ahora vamos con los indirectos. Seamos generosos y supongamos que no envían remesas a sus países y no ahorran y lo gastan todo aquí pagando en IVA no reducido, del 19%. Esto nos da casi 2000 euros al año en impuestos indirectos.

Una aportación anual total en ambos tipos de 5.090.400.000 euros.


2ª Intangibles: Esta parte también tiene sus intangibles, alguna posible aportación cultural que pueda enriquecernos de algún modo y no se me ocurre nada más. Si algún perroflauta del multiculturalismo quiere sugerir algo que lo escriba y lo pondré si no es muy tocho.


APORTACIÓN TOTAL PROVISIONAL: 5.090.400.000 euros + intangibles.


Concusiones provisionales: Por el momento reciben 2.5 veces más de lo que aportan. Pagan unos 5.100 millones de euros en impuestos directos e indirectos y suponen un gasto de unos 12.800 millones (sin contar todavía ni una ayuda, ni un subsidio, ni una prestación por desempleo). Pero vamos a seguir afinando esto y a incluir las ayudas, subsidios, prestaciones, y lo que les es devuelto en la declaración por hijos, becas compensatorias, comedor escolar, etc. Estaría bien conseguir al menos una aproximación de lo que pueden suponer esos gastos.

He estado unos días fuera, veo que no ha suscitado mucho interés pero al menos sirve para hacernos una idea de lo que nos cuesta la inmi gración tercermundista y que no nos vendan la moto más con las pensiones y demás chorradas del ramo.

Todas las aportaciones están contabilizadas y los gastos que nos generan las superan por mucho, aún así quedarían por añadir unas cuantas cosas a los gastos que son difíciles de medir pero mayores que 0.

Por lo que se ha demostrado que los 6 millones de pagapensiones nos "cuestan", es decir, ahorraríamos si no estuvieran aquí contando los impuestos que pagan, una cantidad mayor de 8000 millones al año (pagan, siendo muy generosos, 5000 millones de impuestos y nos gastamos en ellos sólo en educación, sanidad y cárceles 13000 millones), que podría ser razonable pensar que ronde, contando los subsidios, prestaciones, ayudas familiares, comedores escolares, desgravaciones fiscales, etc., los 15000 millones de euros al año.

Nos cuestan una cantidad que está entre los 8.000 y los 15000 millones al año tirando muy por lo bajo.

La limosna de los 420 euros a parados que no tenían ningún ingreso y no vivían con nadie que lo tuviera, tuvo un coste de 640 millones de euros en 6 meses y la gente puso el grito en el cielo por el "despilfarro", gastamos 20 veces más en ayudas directas o indirectas a los pagapensiones al año.

Pues los matamos a todos.

Hitler aprueba este hilo.

Ákrata dijo:

Pues los matamos a todos.

Hitler aprueba este hilo.

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En caso de no quererlos aquí bastaría con no permitirles la residencia en nuestro país a los extranjeros que no hayan sido invitados.

Dentro de que estoy de acuerdo en descachondear el tema inmigratorio, podríamos postear otros datos sobre el rendimiento académico patrio, nuestra competitividad, nuestra ética de trabajo, nuestro afán de coleccionar pisos, nuestra tendencia a creernos que el banquero es nuestro amigo, etc etc, todo ello muy muy español y que tiene que ver mucho más con nuestra situación actual de hez que los pagapensiones, sencillamente.

Quieres un chivo expiatorio, es humano...

Primero tendriamos que plantearnos que es un pais ,y luego calcular si compensa el impacto racial ,cultural o religioso,

Tambien hay que pensar que en españa no se ha filtrado la inmigracion de hecho contra mas antecedentes penales tienen ,antes consiguen la nacionalidad, y mejor son tratados,

¿Cómo calculamos todos los beneficios que dan a los empresarios al trabajar en oscuro?

el rollo es que, aquí no hace falta una aportación previa para obtener los beneficios del sistema, eso sí si llevas veinte años trabajando terminas de cobrar el paro y por desgracia no encuentras trabajo, te dan de baja de la atención sanitaria y tienes que meterte en la tarjeta de un familiar que siga trabajando.

bueno zp ya recula y apoya las medidas contra la libre circulación de pagapensiones por la U.E., vivir para ver.

¿Sana? costumbre esa de medir y calibrar todo; hasta las personas, en el debe y en el haber.

Ákrata dijo:

Dentro de que estoy de acuerdo en descachondear el tema inmigratorio, podríamos postear otros datos sobre el rendimiento académico patrio, nuestra competitividad, nuestra ética de trabajo, nuestro afán de coleccionar pisos, nuestra tendencia a creernos que el banquero es nuestro amigo, etc etc, todo ello muy muy español y que tiene que ver mucho más con nuestra situación actual de hez que los pagapensiones, sencillamente.

Quieres un chivo expiatorio, es humano...

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Eso es una opinión, sin ningún tipo de datos ni argumentos. Estaría bien que respetáramos la naturaleza del hilo hablando con propiedad y aportando hechos y datos. Por lo demás precisamente en este foro se habla de esos temas que mencionas en el 90% de los hilos. Este trata sobre la inmi gración, que es un factor más de los muchos que hacen que vivamos como vivimos, peor que unos y mejor que otros.

Precisamente lo que estamos cuantificando es si "tiene que ver mucho más con nuestra situación actual de hez" que otros o no, y cuánto. Si nos afecta positiva o negativamente y por cuánto.

Para que yo buscara un chivo expiatorio tendría que pensar que los pagapensiones son los culpables de que no vivamos mejor (entre otros factores). Lo que yo pienso es que los culpables de que no vivamos mejor son o somos quienes hemos decidido, unos por interés político y otros de buena fe, tirar el dinero de esa forma. Es decir, si mañana ZP decide donar 100000 millones a Somalia y España quiebra, los culpables no son los somalíes por aceptar el dinero, eso es lo natural, a quien habría que ejecutar es a ZP por expoliarnos de ese modo. Lo mismo ocurre con la inmi gración.

Lo primero es definir "inmigrante" para que sea un término útil.

- ¿Incluímos a todos los del Espacio Económico Europeo?. Son la mayoría y la única forma realista de tomar la más mínima medida hacia ellos sería la salida de la UE.

- ¿Incluímos nacionalizados?

Hay que tener muy en cuenta estas consideraciones al hablar de "pagapensiones" o "extranjeros", ya que se nos inflan mucho las cifras y resulta que a lo mejor están recibiendo servicios que los españoles recibimos en otros países de la UE del mismo modo, recíprocamente.

Luego, aunque la extradición entra países de la UE existe cuando tienen causas pendientes en el otro país, la expulsión no existe. No puedes mandar a un rumano, lituano o búlgaro (por poner unos cuantos ejemplos de colectivos sobrerrepresentados en las prisiones españolas) a su país. Aunque le mandaras podría volver sin ningún problema.


Si no tienes en cuenta estos puntos, todo queda en rabieta de partido anti-inmi gración porque las cifras reales quedan radicalmente distorsionadas.

La inmi gración no es el verdadero problema. Es una consecuencia del primero y más grave de todos: la democracia.

Luego, quizá la inmi gración sea una de las principales causas de la próxima caida de las democracias en Europa. Sólo por detrás de la quiebra financiera.

Mientras haya democracia la inmi gración será bienvenida. Cada inmigrante es un voto potencial para el futuro. Y en el caso de las administraciones locales para el presente. YO como primera medida abogaría por la eliminación total de las administraciones locales españolas y sus aciagas concejalías de bienestar social.

muyuu dijo:

Lo primero es definir "inmigrante" para que sea un término útil.

- ¿Incluímos a todos los del Espacio Económico Europeo?. Son la mayoría y la única forma realista de tomar la más mínima medida hacia ellos sería la salida de la UE.

- ¿Incluímos nacionalizados?

Hay que tener muy en cuenta estas consideraciones al hablar de "pagapensiones" o "extranjeros", ya que se nos inflan mucho las cifras y resulta que a lo mejor están recibiendo servicios que los españoles recibimos en otros países de la UE del mismo modo, recíprocamente.

Luego, aunque la extradición entra países de la UE existe cuando tienen causas pendientes en el otro país, la expulsión no existe. No puedes mandar a un rumano, lituano o búlgaro (por poner unos cuantos ejemplos de colectivos sobrerrepresentados en las prisiones españolas) a su país. Aunque le mandaras podría volver sin ningún problema.


Si no tienes en cuenta estos puntos, todo queda en rabieta de partido anti-inmi gración porque las cifras reales quedan radicalmente distorsionadas.

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Esto es un aporte. Podemos organizarlos en comunitarios y extracomunitarios. O agruparlos a todos como he hecho en una sola categoría de engloba a todos los que son pagapensiones. La diferencia es que unos están aquí legalmente, aunque la mayoría reciben más servicios gratuitos que los que recibimos nosotros en sus países, y los otros han entrado la gran mayoría de forma ilegal.

De todos modos los del Espacio Económico Europeo NO son mayoría como has dicho.

1 Sudamérica 36,21%
2 Europa Occidental 21,06%
3 Europa del Este 17,75%
4 África del Norte 14,83%
5 África subsaharianos 4,12%
6 Extremo Oriente 2,72%
7 Subcontinente indio 1,46%

Estos son los contabilizados oficialmente, hay que sumar todos los marroquíes, argelinos, ecuatorianos etc. que campan por aquí sin contabilizar.

Moliva dijo:

Esto es un aporte. Podemos organizarlos en comunitarios y extracomunitarios. O agruparlos a todos como he hecho en una sola categoría de engloba a todos los que son pagapensiones. La diferencia es que unos están aquí legalmente, aunque la mayoría reciben más servicios gratuitos que los que recibimos nosotros en sus países, y los otros han entrado la gran mayoría de forma ilegal.

De todos modos los del Espacio Económico Europeo NO son mayoría como has dicho.

1 Sudamérica 36,21%
2 Europa Occidental 21,06%
3 Europa del Este 17,75%
4 África del Norte 14,83%
5 África subsaharianos 4,12%
6 Extremo Oriente 2,72%
7 Subcontinente indio 1,46%

Estos son los contabilizados oficialmente, hay que sumar todos los marroquíes, argelinos, ecuatorianos etc. que campan por aquí sin contabilizar.

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De Europa del Este la gran mayoría son rumanos, búlgaros y polacos (lituanos y de otros países nuevos de la UE hay menos). Todos ellos miembros del EEE aunque muchos entraron cuando no lo eran. El único contingente significativo de Europa del Este fuera de la UE es el ucraniano.

Hay estadísticas claras al respecto. De Sudamérica, la gran mayoría son españoles ya y por tanto no contarían como pagapensiones. Los países de ex-colonias obtienen la nacionalidad en unos pocos años.

Échale un ojo a un periódico comunista como Expansion:

Mitos sobre inmigracin (I): Ni son el problema de las cuentas municipales ni usan ms los servicios pblicos - Expansin.com

Mitos sobre inmigracin (II): con crisis o sin ella, harn falta ms pagapensiones - Expansin.com

Mitos sobre inmi gración (I): Ni son el problema de las cuentas municipales ni usan más los servicios públicos

Publicado el 02-02-2010 , por David Page y María G. Mayo

La crisis, que para bien y para mal todo lo puede, había hecho retroceder la inmi gración hasta la quinta posición entre los problemas que más preocupan a los españoles (antes de que la recesión se hiciera presente, la llegada de ciudadanos extranjeros al país entraba persistentemente en el podio de las preocupaciones del Barómetro del CIS). Y pese a la recesión, y en contra de los pronósticos de muchos, la convivencia entre pagapensiones y autóctonos sigue siendo sosegada, sin reacciones defensivas, sin tensiones sociales ni incidentes relevantes. Sin embargo, la pretensión de los ayuntamientos de Vic y de Torrejón de Ardoz de cerrar el padrón a los sin papeles, y el ruidoso debate político y mediático posterior, ha colocado de nuevo el tema de la inmi gración en la picota.


La Constitución establece que el empadronamiento es un derecho y un deber de cualquier persona que habita en el país, con independencia de que su situación de residencia sea irregular. El empadronamiento da acceso a los servicios sociales, singularmente sanidad y educación, que desde mediados de los noventa se reconocen en las leyes estatales y autonómicas como un derecho universal de todo ser humano. De ahí que los planes de los consistorios de Vic y Torrejón hayan reabierto el debate en torno a la incidencia de una población inmigrante que se ha multiplicado por diez en poco más de una década (de 542.000 extranjeros en 1996 a los 5,6 millones de hoy) sobre la saturación de los servicios públicos y sus problemas de financiación.

¿Problema de presupuesto?

Los expertos entienden que las motivaciones de los ayuntamientos que han levantado la liebre se reparten entre las electorales (en Vic el partido más votado enarbola un mensaje marcadamente xenófobo y, además, las elecciones autonómicas catalanas están a la vuelta de la esquina) y hasta cierto punto sociales (en ambos municipios la población inmigrante ronda el 25% del total y los consistorios temen tensiones entre autóctonos y extranjeros).

La presión de los números gente de izquierdas también ha jugado un rol importante. Pero poco tienen que ver los problemas de la financiación local que ellos aducen. Principalmente, porque los servicios con facturas más onerosas son los sanitarios y los educativos, ambos de titularidad autonómica. Sí es de responsabilidad municipal la política de integración, pero su peso en los presupuestos municipales es relativo. "De los 3.000 millones del presupuesto anual del Ayuntamiento de Madrid, 240 millones están destinados a políticas sociales y de ellos sólo 12 van a políticas de integración", explica Alfonso Utrilla, profesor del departamento de Hacienda y Sistema Fiscal de la Universidad Complutense de Madrid. "El peso de los pagapensiones en el presupuesto de los ayuntamientos no es muy alto. La recesión afecta a la financiación de los ayuntamientos, pero poco tiene que ver con los extranjeros".

"El peso de los pagapensiones en el presupuesto de los ayuntamientos no es muy alto. La recesión afecta a la financiación de los ayuntamientos, pero poco tiene que ver con los extranjeros"

Dan más de lo que gastan

Los datos oficiales sobre la aportación de los pagapensiones a las arcas públicas han quedado desactualizados. La Oficina Económica del Gobierno, entonces comandada por Miguel Sebastián, presentó en 2006 un amplio estudio sobre la contribución económica de la población extranjera. Las cifras no podían ser más favorables. Los pagapensiones habían sido directamente responsables de la mitad del fuerte crecimiento del PIB español entre 2000 y 2005 (con un 3,6% de crecimiento medio anual), habían elevado en 623 euros la renta por persona, y, sobre todo, su aportación a las arcas del Estado era francamente positiva: absorbían el 5,4% del gasto público, 18.618 millones de euros, y aportaban el 6,6% de los ingresos totales, con 23.402 millones. El saldo neto de su contribución era de 4.784 millones (la mitad del superávit de entonces del conjunto del sector público). Y, según el informe de Moncloa, no había posibilidad de que esta posición se revertiera hasta al menos 2012.

La crisis se ha cebado, a modo de desempleo, con el inmigrante: su tasa de paro alcanza el 29,7%, frente al 16,8% de media de los españoles. Sin embargo, los expertos, a falta de datos oficiales, estiman que la aportación de los extranjeros a las arcas públicas sigue ofreciendo un saldo neto positivo.

"Su contribución [vía impuestos y cotizaciones a la Seguridad Social] está claro que ha bajado un poco. Pero sigue habiendo 1,8 millones de extranjeros trabajando. El saldo entre aportaciones y gastos era muy grande como para que el aumento del paro la haya eliminado", explica Miguel Pajares, profesor de Antropología Social de la Universidad de Barcelona y autor del informe inmi gración y mercado de trabajo que anualmente publica el Observatorio Permanente de la inmi gración. "Los extranjeros, mayoritariamente jóvenes, cobran menos pensiones y utilizan menos los servicios sanitarios; eso no cambia porque haya más paro. Y el cobro de prestaciones por desempleo por parte de extranjeros aún sigue siendo muy bajo", sentencia.

Los servicios con facturas más onerosas son los sanitarios y los educativos, ambos de titularidad autonómica

De hecho, son varios los estudios que confirman que los efectos beneficiosos del boom demográfico generado por la inmi gración no son flor de un día, sino que se van a poder notar durante décadas. Según un informe de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada, la inmi gración retrasaría cinco años la entrada en déficit del sistema de pensiones (tal y como se concibe hasta ahora, sin la reforma que se comenzará a negociar), de 2023 a 2028.

El inmigrante usa menos los servicios sociales

En plena crisis, "la población inmigrante va a ser más propensa que la población general a necesitar apoyos sociales", indica Carmen Alemán, catedrática de Servicios Sociales de la UNED. Es muy probable. Su concentración laboral en sectores de actividad sensibles al ciclo económico (singularmente la construcción) y la falta de redes familiares en que apoyarse podrían dejar más expuesto al extranjero. Sin embargo, "el pronóstico del futuro crecimiento de las demandas no debe distorsionar la imagen real de los usuarios de los servicios sociales. Aunque existen estereotipos que presentan a los pagapensiones como usuarios crónicos, los estudios invalidan esa consideración. Los datos acreditan que la frecuencia con que usan los servicios sociales es inferior a su peso demográfico", señala Alemán. También la Encuesta Nacional de Salud apunta en esta dirección: el inmigrante utiliza menos el médico de familia, la asistencia especializada, los servicios de cirugía, de diagnóstico y de tratamiento; y sólo hace un mayor uso que los autóctonos de las urgencias.

"Los datos acreditan que la frecuencia con que usan los servicios sociales es inferior a su peso demográfico", señala Alemán

"Las limitaciones de las políticas de salud se utilizan a menudo como argumentos contra la inmi gración", apuntan Guillem López Casasnovas y Gabriel Ferragut, catedrático y profesor de Economía de la Universidad Pompeu Fabra. "En realidad, todo apunta a que el inmigrante hoy no sería una carga para el sistema sanitario si la financiación autonómica recogiera correctamente el impacto de la variación poblacional que la misma inmi gración supone (igualmente para el caso de la educación)", sostienen en un reciente estudio.

Peligro de exclusión

Los pagapensiones no sólo utilizan menos los servicios sociales, los usan también de distinta manera. Para los autóctonos el sistema de servicios sociales "funciona a modo de última red de seguridad y de protección ante el riesgo de vulnerabilidad y la exclusión social", indica Gregorio Rodríguez Cabrero, catedrático de Sociología de la Universidad de Alcalá de Henares. Pero para los pagapensiones "los servicios sociales se convierten en la puerta de acceso para su proceso de inserción, más si cabe si tienen algún déficit con respecto al acceso al mercado laboral, o la primera puerta de entrada en muchos casos para el resto de servicios públicos y políticas sociales". Por ello, la restricción al empadronamiento (y con ello a los servicios públicos) pretendida por Vic y Torrejón, aparte de ilegal, podría convertirse en una peligrosa vía para conducir a los pagapensiones irregulares hacia la exclusión .

Una exclusión que ya viven en carne propia desde el momento en que el sin papeles, empadronado o no, se encuentra de lleno en la economía sumergida. "Si hay pagapensiones irregulares en España es porque tienen empleo, cobrando en oscuro, pero con empleo. El problema es la economía sumergida, es esto lo que hay que eliminar, no apostar por una medida fácil como sacarlos del padrón", expone Gemma Pinyol, coordinadora del Programa de Migraciones de la Fundación Cidob.

"Su contribución ha bajado un poco. Pero sigue habiendo 1,8 millones de extranjeros trabajando. El saldo entre aportaciones y gastos era muy grande como para que el aumento del paro la haya eliminado", señala Pajares

Pese a que parece acreditado que los pagapensiones pagan su factura de los servicios públicos, algunos expertos recomiendan mirar más allá de las cuentas. "Las políticas públicas se tendrían que basar en idénticas pruebas de necesidad y de medios para todo tipo de ciudadanos independientemente de su origen", sostienen López Casasnovas y Ferragut. "Ni las políticas sanitarias para pagapensiones, ni los balances fiscales de grupo, ni las contabilidades generacionales tienen demasiado sentido. ¿Acaso la sociedad puede o quiere rechazar a un ciudadano por no 'contribuir' a las finanzas públicas más que lo que potencialmente puede 'detraer'? ¿Utilizamos esta particular forma de evaluación económica coste-beneficio para otras categorías poblacionales propias (niños, amas de casa, ancianos)?"

Con independencia del peso del inmigrante sobre nuestro Estado del bienestar, las Administraciones deben elegir entre tres posibles escenarios: mejorar la calidad de los servicios sociales, poco probable en plena crisis y sus consiguientes derivaciones en los presupuestos públicos; mantener la calidad actual, opción más realista pero que también requiere incrementos en las dotaciones presupuestarias; o aceptar la pérdida de calidad, que ningún responsable público se atreverá a explicitar y defender, pero que en la práctica puede ser la consecuencia real. El debate no debe centrarse en el lugar de nacimiento de los demandantes de los servicios, sino en qué tipo de servicios queremos y a qué niveles de calidad aspiramos.

Con crisis o sin ella, harán falta más pagapensiones

Publicado el 19-02-2010 , por María G. Mayo y David Page

"Aquí no cabemos todos". Es una frase muy recurrente. Peligrosa y que requeriría muchos matices, pero aún así recurrente. Tanto, que la candidata del PPC a la Generalitat, Alicia ******* Camacho, la ha pronunciado en público en varias ocasiones y pretende que sea el eje de su próxima campaña electoral. Sin embargo, supone uno de los falsos mitos que rodean al fenómeno migratorio.

Es cierto: España, en apenas quince años, ha multiplicado por diez su población extranjera, hasta rozar los 5,6 millones de pagapensiones el año pasado. Es cierto: el golpe de la crisis parece que está siendo más duro para la población inmigrante. Y aun así, los expertos en demografía y economía van más allá y señalan que no es que 'quepa' más gente, sino que hay motivos para pensar que en los próximos años harán falta muchos más ciudadanos para que la economía funcione. La Comisión Europea ha cifrado en siete millones la población adicional que necesitará España hasta 2030 para equilibrar su economía.

El déficit demográfico, la inviabilidad de las pensiones y la falta de profesionales técnicos llevarán a España a pedir más extranjeros

¿En qué se basan para hacer esta afirmación? Hay tres razones fundamentales. Por un lado, habrá un déficit demográfico enorme, sobre todo entre los más jóvenes. Por otro lado y como consecuencia del anterior, será más cuestionable la viabilidad de un sistema público de pensiones con una población cada vez más envejecida. Y, por último, se necesitarán más trabajadores con perfiles técnicos para un mercado laboral que debe afrontar un nuevo modelo productivo.

Una España envejecida

Las últimas previsiones demográficas del Instituto Nacional de Estadística, publicadas el pasado enero, son contundentes al respecto. Si se mantienen las tendencias demográficas actuales, entre 2009 y 2020 la población española perderá 3,4 millones de efectivos de entre 19 y 40 años (habrá sólo 12,6 millones de personas en esa cohorte). Las estimaciones para 2049 son aún más dramáticas, la población mayor de 64 años se duplicará. Por cada 10 personas en edad de trabajar, habrá casi nueve personas potencialmente inactivas (menor de 16 años o mayor de 64). Media España tendría que mantener a la otra media.


Respecto a la necesidad de un nuevo perfil de trabajadores que requiere la economía española, Florentino Felgueroso, profesor del departamento de Economía de la Universidad de Oviedo, calcula que, comparándonos con Alemania o Dinamarca –países con sistemas económicos de mayor productividad-, España necesitaría ya actualmente entre tres y cinco millones de trabajadores más con perfiles no manuales o técnicos. "Con la falta de jóvenes en los próximos años, este déficit como mínimo se mantendrá", señala.

Para Josep Oliver, catedrático de Economía Aplicada Universidad Autónoma de Barcelona, parte de los perfiles necesarios para hacer frente al nuevo modelo productivo se podrían cubrir con los más de 4 millones de parados que hay en estos momentos. "Pero será clave la formación (muchos españoles y muchos de los que han tienen perfiles de baja cualificación), primero para absorber el elevado nivel de desempleo actual y, después, hacia 2015, para poder desarrollar un patrón de crecimiento más productivo", explica.

A su juicio, otra medida necesaria para equilibrar el desajuste demográfico e impulsar el nuevo patrón de crecimiento sería la incorporación de algunos pagapensiones que aún no trabajan, como los colectivos de mujeres africanas, y el retraso de la edad de jubilación. "Y, en función de todo esto, se necesitarán más o menos pagapensiones", explica.

La crisis frena las llegadas

Más allá de este ejercicio de 'economía ficción', la realidad demuestra que la recesión ha frenado la llegada de extranjeros. La población extranjera en España creció un 7% el año pasado, el menor crecimiento desde 1992. Y, según datos del Ministerio del Interior, las llegadas de sin papeles descendieron un 46% en 2009 respecto al año anterior y en un 80% en relación a 2006, uno de los peores años en la lucha contra la inmi gración ilegal. "La mayoría de los pagapensiones vienen por motivaciones laborales. Así que, por la coyuntura actual, van a transcurrir unos años, probablemente una década, con poca inmi gración. Ahora no la hay, y va a tardar en haberla", indica Miguel Pajares, profesor de Antropología Social de la Universidad de Barcelona.

A medio plazo, España tendrá que competir con otros países de su entorno por la captación de los pagapensiones de mayor formación

No sólo llegan menos, además algunos se van debido al fuerte deterioro del mercado de trabajo. Aparte de los 9.800 extranjeros que han aprovechado el plan de retorno voluntario del Gobierno para hacer el camino de vuelta, los expertos ya han detectado la existencia de trasvases de población extranjera hacia otros países de la Unión Europea, singularmente centroeuropeos, en busca de una nueva oportunidad laboral.

Sin embargo, según los datos provisionales del último padrón, la población extranjera aumentó en 330.000 personas durante 2009, hasta los 5,6 millones. Los expertos alertan de que este crecimiento es artificial, un desfase estadístico. "La contabilización de las salidas de extranjeros es particularmente dificultosa. Muchas de esas salidas pasan desapercibidas porque nadie cursa su baja del padrón cuando se marcha. El INE tarda dos años en detectarlas", explica Joaquín Arango, catedrático de Sociología de la Universidad Complutense y experto en migraciones. "Hay indicios, sólo impresiones, de que se están intensificando las salidas. La cifra de 300.000 pagapensiones más que refleja el padrón está muy fuera de la realidad. El dato es poco creíble, no es posible en 2009".

La crisis hace que vengan menos y que se vayan más. Pero nuestra economía y nuestra estructura de población necesitan a medio plazo que se rompa esta nueva tendencia. Por ello, según señalan Felgueroso y Oliver, en los próximos años vamos a tener que dar un giro a nuestra política migratoria : tendremos que competir con otros países para atraer a los mejores. "Tendremos que realizar captaciones para fomentar que venga gente con perfiles adecuados, y no somos un país especialmente atractivo para los extranjeros frente a otros europeos. Será difícil pero necesario", concluye Felgueroso.