Una cosa es alegrarse de una desgracia, algo da repelúsnte, la muerte de alguien, un drama o tragedia que le ocurre a alguien, y eso es de ser mala persona directamente; y otra es alegrarse de cuando una persona es mala/gilpollas/orate/estulto y le sucede algo que esa misma persona se ha buscado por ser mala/iluso/orate/estulto. Reírse del karmazo y de la justicia poética o divina, yo creo que es hasta sano y natural y altamente satisfactorio.
Pongo como ejemplo el hilo en este foro "Recopilación de PROGRES recibiendo KARMA", salen casos algunos horrorosos de decapitaciones, mutilaciones y asesinatos de personas cometidos por gente variada (seres de luz/maltratadores/menas/pagapensiones agresivos/delincuentes), pero es la gente a la que el asesinado ha defendido a muerte bajo los preceptos progres de su propia ideología, es el trabajo de Darwin que se ha realizado solo. Esas y esos feministas que "disfrutan" de su ideología, o mujeres que han sido asesinadas/maltratadas por los jovenlandeses o malotes con los que se han acostado y de los que se habían "enamorado", hombres betas que defendían a muerte a cierto tipo de mujeres (asiáticas, rumanas, latinoamericanos) y acaban "probando" las mieles de irse con ellas, hombres betas que se dejan mangonear por visilleras y luego lloran el resultado. No hay caso en ese hilo que no haya sucedido porque el protagonista no se lo haya buscado.
O el ejemplo que el mismo
@AYN RANDiano2 propone en el hilo de los peligros energéticos/ espirituales de votar, el que vote que luego no se queje si el político al que ha votado le destroza la vida.
A día de hoy, podemos poner el ejemplo de las banderillas y de los simples del ojo ciego que habían salido a aplaudir al balcón en el confinamiento. Éstos van a ser los que se coman la leche del circovid si no lo han hecho ya, yo conozco algunos casos y defienden a muerte la farsa.
Y basándome en este concepto es a lo que llamó yo "Schadenfreude". Por la falta de luces o por ser iluso que te pase algo que has defendido a muerte por ideología o por ser un me gusta la fruta malnacido que no paraba de liar al personal, y luego el resultado te explote en toda la cara.
No es alegrarse de la desgracia que le sucede a alguien, es alegrarse del karmazo que se merece.