Es difícil quedarse en silencio, aun sabiendo que es mayoritariamente vano el tratar de comunicar aquello que uno haya sentido, vivido, visto, con sus propios ojos del ser; son "comprensibles", todos los puntos de vista, desde cierta perspectiva. Es comprensible la incredulidad, el escepticismo, la simple desgana, de los demás, ante lo que otros digan que pasa.
Y es incomprensible, para otros, pues, el por qué algunos de nosotros tomamos ciertos caminos. Nos tachan de locos; pero lo que no saben es que estamos haciendo exactamente lo mismo que ellos hacen, que todos tendemos a hacer: luchar con uñas y dientes por hacer realidad nuestros sueños. Aunque tales, supongan soledad, pobreza, aislamiento, incomprensión, desidia y desdén ajeno, sobre todo; sentirse solo ante una apuesta más grande que la vida misma es lo que puede hacernos perder la fe en ella, pero a la vez seguir apostando es lo que da chispa alguna a una existencia, que, para lo que aquí se nos vende, representa un grado de conformidad inaceptable para cualquier alma que se sienta libre de verdad. Abandonar lo seguro, lo que hacen todos, e ir a lo que escuchas dentro de ti que has de ir. Y ver a los que no lo hacen como un ejemplo gris. Es inevitable, en cierto modo acabar viéndolo así, pero no es para todos lo que uno u otro decida hacer, para sentirse vivo, en un lugar que te anima a vivir muerto en vida, si no lo haces.
Viste una vez una luz, una puerta, y un camino y horizonte abierto y decidiste seguir por el. Por que si no lo hubiera hecho, estaría toda la vida arrepintiéndome de no haberlo hecho; aunque suponga pobreza, soledad, aislamiento, y desdén ajeno.
Es lo que tiene ver nuevos horizontes que vivir, que la conformidad de la que muchos presumen solo hasta que se mueren, se convierte en insoportable para tí; no les culpo por supuesto, todo depende de cuan expandida tengan la esfera de su consciencia personal.
Ya os doy testimonio yo de que el camino de expansión de la misma, y autoconocimiento, es uno muy solitario, por ello casi nadie cree en él.
Buena prisión para la consciencia, la de este planeta, buena prisión, aquella de la cual solo los locos consiguen escapar, aquella en la que los listos e inteligentes, son los más eficientes carceleros.