Venezuela es un país tercermundista y siempre lo será por la genética de sus habitantes.
Si en vez de ser un país habitado por triraciales, mulatos y mestizos fuera un país habitado por europeos, sería un país desarrollado.
No es casualidad que los países más desarrollados de América Latina (Argentina, Uruguay, Chile) sean los más desarrollados, pero tampoco tienen una genética completamente europea como Estados Unidos y Canadá (menguante por la inmi gración, es cierto), que es la diferencia entre los mediocres países del Cono Sur y los países más ricos del mundo.
No son los países los que hacen a la gente, es la gente la que hace los países. Si 50 millones de europeos pasaran a poblar una región de América (o incluso de África), cualquiera, sustituyendo por completo a sus habitantes, se convertiría rápidamente en la región más rica y desarrolla del continente, y todos los latinoamericanos no-blancos intentarían por activa y por pasiva emigrar allí para parasitar.
Lo que ha destruído a Venezuela ha sido la natalidad diferencial entre los estratos neցroide-amerindios, con muchos hijos por mujer, y la blanca, con pocos hijos con mujer, que ha creado una sociedad estulta, poco productiva, que vive de subvenciones del estado y por ende es presa fácil del populismo chavista y de sus burdas redes caciquiles (no penseis que al venezolano promedio el chavismo ha de hacerle muchas concesiones, comida y poco más mientras siguen viviendo en la chabola y ellos robando desde las administraciones públicas).
El destino de esa sociedad es caminar hacia la degradación más absoluta a medida que este diferencial de natalidad vaya profundizándose, en conjunción con el éxodo de las clases altas, hasta que suceda lo que pasó en la India clásica, que la población indoeuropea dirigente que llevó al culmen dicha sociedad desaparezca por mestizaje o engullida por la natalidad de las razas oscuras, convirtiéndose en la inmunda letrina inhumana que es hoy día.
Aunque en la India al menos instauraron un rígido sistema de castas (tal y como sucedía en la América Hispana) para impedir la degracdación de la sociedad hasta su más profundo abismo.
---------- Post added 23-jun-2018 at 00:19 ----------
Hay un par de ejemplos bien patentes de justo lo contrario: máxima libertad y del tercermundismo a potencia mundial en 50 años. Hong Kong y Singapur.
Hong Kong y Singapur están habitados por chinos, un pueblo inteligente y trabajador igual que otros asiáticos del norte (japoneses y coreanos). De hecho China se está convirtiendo en potencia mundial.
Singapur es un caso que explicaría el impacto de la genética en el devenir de las sociedades. Es un oasis de desarrollo enmedio de países mierderos del Sudeste Asiático (Indonesia, Filipinas, Vietnam, Camboya, Thailandia, Laos, Birmania, Timor), y todo gracias a los chinos.
El único país que se medio salva es Malasia, y todo gracias a su importante minoría china (23% de la población). Desgraciadamente también están sufriendo un proceso de disgenesia (en realidad todos los países del planeta tierra están sufriéndolo), pues al momento de la independencia eran un 38%.
La diferencia entre un país mediocre (Malasia) y uno rico (Singapur) es el porcentaje de chinos (podrían ser europeos, o gente de las castas altas de la India también), pues aquí son el 76%.
La genética es lo que explica el devenir de las sociedades.
Malaysian Chinese - Wikipedia
Chinese Singaporeans - Wikipedia