Siria XXXIV: Guerra en Siria

Estado
No está abierto para más respuestas.

SPQR

Lo van a pagar los borricos.
Desde
3 Abr 2011
Mensajes
13.903
Reputación
33.169
Lugar
Far Southeast
Érase una vez en que se podia viajar en ferrocarril de Haifa en Palestina, a El Cairo.

Amro Ali ‏Cuenta verificada @_amroali 22 oct.

Once upon a time, you could actually take a train from #Palestine's Haifa to Cairo. How surreal this all looks now. (1922 advertisement).



Twitter

Y en esto llegó el Sionismo, y mandó parar...


Amro Ali‏ Cuenta verificada @_amroali 22 oct.

Zionist terror gangs detonated trains on the Haifa-Cairo railway in Feb 1948 & other routes. So yeah, long before your "extreme Jovenlandeses."





-------------------

Cae otro asesino.

Ahmad Al-Issa‏ @ahmadalissa

#SyrianArmy arrests #ISIS terrorist Rakkawi who killed the most famous martyr in #Syria, Yahia #Shighri (picture)
#FromSyria



Twitter

-----------

Debunking Myths About the Kurds, Iraq, and Iran - War on the Rocks

------------------

Un peligro fassistah y antisemita el Corbyn, sin duda alguna.

The Sunday Times‏ Cuenta verificada @thesundaytimes

Jeremy Corbyn has refused to attend an official dinner with Benjamin Netanyahu Jeremy Corbyn snubs Benjamin Netanyahu dinner | News | The Times & The Sunday Times



Twitter
 
Última edición:

pgas

Madmaxista
Desde
17 Sep 2014
Mensajes
9.054
Reputación
57.308
[FONT=Verdana, sans-serif][FONT=Verdana, sans-serif]Respecto a los terroristas moderados que están regresando a Europa, el sábado leí un artículo de Mikel Ayestarán comentando que la consigna entre los paises de la coalición es "cazar" en Siria a todos los "europeos" que fueron a luchar allí. El que lucha en Siria, muere en Siria, o algo así.

[/FONT]
Comenta que en Raqqa, permitieron rendirse a las ratas negras de nacionalidad Siria, pero que a los extranjeros no, y que estos se atrincheraron en el estadio y resistieron 48horas mas hasta ser aniquilidos.[/FONT]



[FONT=Verdana, sans-serif]Enlace:[/FONT]

[FONT=Verdana, sans-serif]Twitter[/FONT]

[FONT=Verdana, sans-serif]A la caza del yihadista extranjero | Hoy[/FONT]


Un soldado de las fuerzas especiales iraquíes apunta al combatiente del Estado Islámico al que acaba de abatir. :: reuters

Occidente teme el retorno de sus nacionales alistados en el Estado Islámico tras su derrota militar, y los ha situado en la diana. «Quien viajó para combatir aquí, muere aquí», resume un enviado de EE UU a Siria

MIKEL AYESTARAN Sábado, 28 octubre 2017, 09:14

El califato ha pasado de ser el sueño de miles de yihadistas que acudieron a la llamada a la guerra santa que su líder, el autoproclamado califa Abu Baker Al Bagdadi, realizó en junio de 2014, a convertirse en su tumba. Se calcula que, en su momento de mayor esplendor, la columna extranjera del grupo yihadista Estado Islámico (EI) estuvo formada por entre 30.000 y 40.000 combatientes llegados de un centenar de países, entre ellos unos 5.000 europeos (con Alemania, Francia y Reino Unido como principales lugares de origen), según los datos recogidos por el centro de investigación The Soufan Group. Estados Unidos lidera una coalición internacional para derrotar al EI y que tiene además el objetivo de «asegurar que cualquier yihadista extranjero que viajó para combatir aquí, muera aquí», declaró Brett McGurk, enviado especial de Washington a la coalición anti EI, en una entrevista concedida a la cadena árabe Al-Aan pocas horas antes del final de la operación para liberar Raqqa. Una estrategia que comparten otros países de la coalición como Francia y Reino Unido.

Raqqa, la capital del califato en Siria, cayó después de cuatro meses de ofensiva y de una negociación final en la que el EI accedió a rendirse, pero los milicianos extranjeros quedaron fuera del pacto y combatieron hasta la muerte. Unos 300 hombres se atrincheraron en el estadio de la ciudad y resistieron 48 horas tras la evacuación en autobuses de sus compañeros sirios. Los mandos kurdos de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), la alianza de milicias kurdas y árabes que combaten con el apoyo de EE UU, disponían de una lista con nombres y fotografías de combatientes extranjeros. Tenían la orden de «eliminarlos» porque en caso de detenerlos «sus países de origen no los querían de vuelta», aseguraron fuentes kurdas a la agencia AP.
[FONT=Verdana, sans-serif]
[/FONT]

[FONT=Verdana, sans-serif]Buenos aportes en general, se agradece, pero no compr[FONT=Verdana, sans-serif]o [FONT=Verdana, sans-serif][FONT=Verdana, sans-serif]l[/FONT]a[/FONT] versi[FONT=Verdana, sans-serif]ó[/FONT]n de "[/FONT][/FONT][FONT=Verdana, sans-serif][FONT=Verdana, sans-serif]Brett McGurk, enviado especial de Washington a la coalición anti EI" [FONT=Verdana, sans-serif]corroborada oportunamente [FONT=Verdana, sans-serif]por [/FONT][/FONT]"fuentes kurdas a la agencia AP[FONT=Verdana, sans-serif]", no señor[/FONT]:[/FONT]
[/FONT]


[FONT=Verdana, sans-serif]"Las ratas se han rendido en Raqqa" | Cronica Home | EL MUNDO[/FONT]



[FONT=Verdana, sans-serif]
[/FONT]


[FONT=Verdana, sans-serif]Momento en que el jefe de los yihadistas (en la silla, con capucha) negocia la rendición.

La historia, inédita y en exclusiva, de cómo el último líder del Daesh que quedó en la sitiada capital del califato negocia su rendición con las tropas aliadas. Acudió al encuentro drojado.[/FONT]

[FONT=Verdana, sans-serif]Fue el viernes 13, con un francotirador español como testigo en el frente de la caída de la ciudad. La liberación de Raqqa se anunció al mundo unos días después.[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]
FERRÁN BARBE
[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif][FONT=Verdana, sans-serif] - [/FONT]RAQQA[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]25 oct. 2017 15:45[/FONT][FONT=Verdana, sans-serif]

«Las ratas que quedaban se han rendido. Misión cumplida. Mañana será oficial. Venían todos puestísimos de algo. Estamos casi llorando», nos escribía apresuradamente Arges Artiaga el pasado día 13 desde el mismo lugar donde ese hecho histórico se estaba produciendo, en lo que entonces era una exclusiva mundial, uno de los milicianos españoles de las Unidades de Protección Kurdas (YPG) que desde junio combatían en la ciudad junto a otros regimientos árabes de las Fuerzas Democráticas de Siria (SDF, según sus siglas inglesas).[/FONT]

[FONT=Verdana, sans-serif]Quedaban aún unas pocas bolsas de yihadis irredentos, en torno a 200 asesinos, en su mayoría extranjeros, diseminados entre las ruinas y en los dos infaustos Reichstag de esta guerra -el hospital y el estadio deportivo-, que se negaron a entregar las armas y que un día después abandonaron la ciudad en motos, pick-ups y autobuses, parapetados tras cinturones explosivos, población civil y sus esclavas sensuales. Definitivamente, Raqqa había caído a costa de su destrucción total, aunque hubiera de esperarse algunos días para que las tropas de la coalición lo anunciaran oficialmente y a su zaga, el resto de la prensa mundial.[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]Ese último grupo numeroso de descastados del Estado Islámico, que resistía en la antigua capital del califato del oprobio -cerca de 100- y que sí depuso las armas, se presentó mezclado entre los civiles que retenían en torno a las siete de la tarde del viernes 13, hora local siria (una menos en España) ante un grupo de oficiales kurdos y los miembros de las tribus del Consejo Local de Raqqa (RCC) que habían negociado la rendición, bajo la invisible pero atenta mirada de los consejeros militares norteamericanos. Se les había acabado el fuelle. Los demonios enlutados ya no confiaban en Alá y temblaban como cobardes. Con este último paquete, se cifraban en cuatro centenares los yihadis que habían renunciado a pelear para salvar su vida en Raqqa, durante las semanas precedentes a la rendición de la capital del califato. [/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]No es difícil evocar la desesperación que se adueñó de esos despiadados asesinos en vísperas de su rendición, ante la certeza de que estaban a punto de ser cazados como fieras y fumigados con bombas y mortero. El cabecilla de los yihadis apareció completamente desencajado por las drojas a las cinco de la tarde (hora local siria) y permaneció durante un breve lapso de tiempo discutiendo en árabe con las tribus locales las condiciones de la entrega de las armas del resto de sus hombres. Los asesinos sólo tenían una moneda de cambio que ofrecer para obtener alguna ventaja adicional: la vida de los civiles que habían retenido. Pero su rendición fue incondicional.[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]Dos horas después del cara a cara con el líder de los doblegados asesinos, se entregó el resto de sus hombres, también en un estado deplorable, bajo los claros efectos de las drojas. El encuentro se celebró en un edificio utilizado por los militares de la coalición situado a unos tres kilómetros del estadio, uno de los lugares donde todavía entonces agonizaba un número indeterminado de yihadistas que se cifraba en un par de centenares, los mismos que salieron huyendo un día después, cobardemente parapetados tras mujeres y niños.[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]Era una armada de yonquis renegados. Moribundos en sus estertores. Junto a los cuerpos inertes de los yihadis abatidos por las fuerzas kurdo-árabes en la ciudad de Raqqa acostumbraba a hallarse a menudo un puñado de pastillas desparramadas sobre el suelo. Es bien conocido que, en sus mejores tiempos, solían partir hacia el combate encorajinados por una variedad de metanfetamina conocida como captagón. Lo que se ignoraba es que, en sus capítulos postreros, aplacaban el terror que les provocaba la certeza de su muerte inminente mediante una amplia variedad de opiáceos, ora obtenidos mediante el contrabando, ora robados a los cadáveres de las fuerzas kurdo-árabes que los combatían y que, eventual aunque no tan generalizadamente, se servían también de drojas prescritas poco escrupulosamente por sus servicios médicos. En ambos bandos han sido utilizados los narcóticos.[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]A la postre, una fotografía robada y publicada en exclusiva en este reportaje, capta el momento en que el caudillo de los criminales islamistas -de identidad aún desconocida, pero de nacionalidad siria- se halla sentado en una silla de plástico, inclinado hacia delante en actitud defensiva y desorientada. Aparece embutido en una suerte de chilaba, desprovisto ya de su atuendo ninja de yihadista. El criminal mira en escorzo hacia ninguna parte con aspecto avergonzado, flanqueado por varios militares de las fuerzas kurdo-árabes. Según el gallego Arges Artiaga, miembro de una unidad de francotiradores occidentales, ése es justamente el instante en que el cabecilla de los 100 yihadis del Daesh -ya completamente sometidos- llega a entregar Raqqa a cambio de sus vidas. [/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]Como se intuye en la foto, no se aprecia ya en él ni una traza de aquella arrogancia temeraria que infundía un miedo cerval entre sus enemigos. Se sabe, en todo caso, que los 200 irredentos que se negaron a entregarse abandonaron la antaño capital del califato al día siguiente con destino hacia Deir ez Zor, uno de los pocos lugares de Siria donde todavía resistía un grupo significativo del Daesh. Tras la salida de la ciudad de ese pequeño grupo de renegados -en su mayoría extranjeros- contrarios a la rendición y excluidos de las negociaciones, que aún deambulaban como espectros entre las ruinas durante el día del acuerdo, Raqqa había sido ya desratizada.[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]La salida en vehículos de los terroristas, organizada el pasado día 14, ha sido registrada en un vídeo divulgado por las redes. Según aseguraba en un comunicado la Combined Joint Task Force que coordina Estados Unidos, el convoy excluía a los terroristas extranjeros y, entre ellos, al supuesto autor intelectual del atentado de París.[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]-De modo que los norteamericanos se cercioraron de que no abandonaba Raqqa ningún asesino especialmente señalado- preguntamos al testigo Arges Artiaga.[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]-Ah, ¿sí?, ¿eso dicen?, ¿y cómo? Iban todos amarrados a cinturones de explosivos, armados hasta los dientes y rodeados de sus esclavas y de civiles. Por cierto, ¿quién les proporcionó los vehículos? -nos responde el gallego-. Se fueron, compañero, como quien atraca un banco.[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]-Y tras la fuga en espantada de esos 200 yihadis en compañía de civiles, quedaba todavía por acabar con las células durmientes.[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif]-Raqqa cayó de facto el día 13. Un día después de la huida de las 200 ratas, sólo quedaban ya civiles escondidos entre las ruinas.[/FONT]
[FONT=Verdana, sans-serif][FONT=Verdana, sans-serif]
[/FONT][/FONT]

[FONT=Verdana, sans-serif][FONT=Verdana, sans-serif]PD. Echarle un vistazo a su twiter, es interesante
[/FONT][/FONT]

[FONT=verdana, geneva, lucida, lucida grande, arial, helvetica, sans-serif]https://twitter.com/diasporasmagaz?lang=es[/FONT]
[FONT=verdana, geneva, lucida, lucida grande, arial, helvetica, sans-serif]
[/FONT]
 
Última edición:
Estado
No está abierto para más respuestas.