Investigando citaciones sobre el estallido de la SGM y la economía del 3er Reich

Leovigildo

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3. Cronología de los preparativos para la guerra

[...]

15.03.1939 - Hitler envía a la Wehrmacht al resto de Checoslovaquia y controla la totalidad del país. Al día siguiente se crea el protectorado de Bohemia y Moravia.

21.03.1939 - Las reclamaciones alemanas sobre Danzig se intensifican, y se pide la construcción de una carretera y una línea de ferrocarril que una la aislada Prusia Oriental con el resto del territorio alemán

23.03.1939 - Polonia ordena la movilización parcial de sus efectivos militares

31.03.1939 - UK garantizará la independencia de Polonia con el apoyo conjunto de Francia

03.04.1939 - El alto mando militar alemán recibe la orden de organizar y planear la invasión de Polonia, prevista para agosto de 1939

06.04.1939 - Se formaliza la alianza militar entre Polonia y UK

18.04.1939 - La URSS ofrece a Reino Unido y Francia la creación de una alianza contra Alemania, pero ésta es desoída y rechazada

28.04.1939 - Hitler en un discurso en el Reichstag expone y denuncia los acuerdos entre Polonia y Reino Unido y declara anulado el pacto de no agresión entre ambos países firmado el 26.01.1934. De igual modo, también declara anulado el pacto naval anglo-alemán y mantiene sus reclamaciones en Polonia respecto al corredor de Danzig.

09.07.1939 - Winston Churchill insta al gobierno a que forme una alianza militar con la URSS para poder hacer frente a Alemania, pero no es escuchada por Chamberlain

10.07.1939 - Chamberlain declara que la ciudad libre de Danzig no es únicamente un asunto interno polaco-alemán, y que intervendrá a favor de Polonia en caso de inicio de hostilidades

23.08.1939 - Pacto germano-soviético firmado por los ministros de asuntos exteriores Molotov-Ribbentrop que garantiza un pacto de no agresión, ayuda mutua y cooperación económica. El pacto es visto por PL-UK y FR como una declaración inoficial de Guerra.

24.08.1939 - Alemania denuncia que baterías polacas han disparado a dos aviones de pasajeros de Lufthansa.

25.08.1939 - Firma del acuerdo bilateral de asistencia mutua entre Polonia y Reino Unido en caso de agresión por otro país (eufemismo para referirse a Alemania). En el acuerdo se especifica que ninguna de las partes implicadas tiene la obligación de aceptar acuerdos con otros países que puedan representar una amenaza para los firmantes de este acuerdo bilateral. El pacto es visto en Alemania como una declaración inoficial de guerra. Mussolini informa a Hitler que si ataca Polonia, no cumplirá con la alianza militar enviando su apoyo. La ofensiva alemana se pospone 5 días para tratar de garantizar la neutralidad francesa y británica aunque un pequeño destacamento no recibe correctamente la cancelación del ataque y se produce el Incidente de Jabłonków.

26.08.1939 - Polonia realiza preparativos a gran escala para la guerra y prepara a su población, ciudades, comercios e industrias.

28.08.1939 - Reino Unido se ofrece como mediador para apaciguar la situación entre Polonia y Alemania

30.08.1939 - Polonia ordena a las 16:30h la movilización general de sus efectivos e interrumpe el tráfico ferroviario en el corredor que va a Prusia oriental

31.08.1939 - Hitler realiza una última llamada a la contención para solucionar y zanjar definitivamente mediante un plebiscito el asunto del corredor polaco.

01.09.1939 - Alemania dice responder a las agresiones polacas (Incidente de Gleiwitz) e inicia la invasión de Polonia notificándolo a la embajada británica.

03.09.1939 - Francia y Reino Unido en condición de aliados de Polonia, declaran la guerra oficialmente al estado alemán ante la negativa a su ultimátum de retirar a la Wehrmacht de suelo polaco. Otros países de la Commonwealth también se suman a la iniciativa aliada. Comienza la Segunda Guerra Mundial.

28.09.1939 - Capitulación de Polonia tras la caída de Varsovia el día anterior. Se acuerda con la URSS el reparto de Polonia, y su toma de los países bálticos y Finlandia.

06.10.1939 - Hitler propone un plan de paz en el que Polonia se mantiene como estado independiente aunque anexionándose parte de la zona ocupada correspondiente al corredor de Danzig. Cuenta con un tibio apoyo francés y la medicación de Mussolini, pero el plan es finalmente rechazado por Reino Unido.

Y lo dejo ahí.

4. Detalle de la propuestas de última hora para frenar la guerra



Trad: El mapa de un periodico francés detalla el plan de negociación ofrecido por Hitler el 31 de agosto de 1939 con motivo de una fingida mediación británica ofertada el 28 de agosto. Hitler ha dispuesto, en realidad sin la existencia de una disposición polaca al diálogo, a comprometerse a desarrollar urgentemente esta propuesta: Votación popular -coloreado en oscuro- de Prusia Occidental. Dependiendo del resultado recibe Polonia una conexión extraterritorial con el mar báltico con el puerto de Gdingen o Alemania recibe un homólogo hacia Prusia Oriental. Danzig retornaría al Reich alemán bajo salvaguardia de los intereses econoómicos polacos. Al mismo tiempo Alemania garantizaría las fronteras occidentales polacas y con ello se renunciaría al resto de fronteras históricas alemanas.

Polonia sin conocimiento de este plan, únicamente tras haber tenido constancia de las iniciativas británicas de mediación, ha dispuesto el 30 de agosto la movilización general, y en referencia a la propuesta de Hitler en la noche del 31 de agosto ha declarado por radio la guerra a Alemania.


La propuesta de Hitler se acompaña de 16 puntos que se detallan a continuación:

1) Danzig retorna de forma inmediata a Alemania dado su carácter histórico alemán y el deseo manifiesto de su población.

2) El llamado corredor de Danzig será definitivamente polaco o alemán según voluntad popular vía referendum.

3) Para garantizar un referendum objetivo, a) Sólo podrán votar los alemanes que tuvieron su residencia o nacieron en el territorio disputado del corredor hasta la fecha del 1 de enero de 1918. Fechas posteriores o distinta residencia no computa. b) Se creará una comisión internacional de las cuatro grandes potencias (URSS, UK, FR, IT) para que velen por unos comicios limpios.

4) La ciudad portuaria de Gdingen permanecerá en cualquier caso del lado polaco. Si hubiera disputas respecto al territorio adyacente y no se hallase solución, una comisión internacional de arbitraje lo resolvería.

5) Para garantizar un plebiscito justo, no se ejercerá la votación hasta que no haya transcurrido un plazo mínimo de preparación de 12 meses

6) Durante ese tiempo, Alemania mantendrá sus conexiones con Prusia Oriental y Polonia con Gdingen. Para determinar un tráfico fluido y libre de limitaciones, se fijarán qué carreteras y vías férreas posibilitarán dicho tráfico.

7) Respecto al resultado de la votación, se fallará en base a una mayoría simple.

8) Si el resultado fuera favorable a Alemania, se construiría una conexión en dirección Bütow-Danzig (concretamente Dirschau -Tczew en la acualidad, ciudad polaca que hacía frontera con Danzig-), consistente en una autopista y un tendido férreo de 4 vías. La construcción sería llevada a cabo de manera que no enteropeciese en ningún momento el sistema de comunicaciones polaco, ya sea mediante puentes o túneles subterráneos. El ancho de esa zona sería 1km y estaría bajo soberanía alemana. En caso de resultado favorable a Polonia, Polonia obtendría los mismo derechos para la ciudad portuaria de Gdingen y garantizar su salida al mar.

9) Si el resultado fuese favorable a Alemania, se haría un intercambio de población alemana y polaca

10) Los deseos de derechos especiales y privilegios polacos en el puerto de Danzig serían paritarios para Alemania en el puerto de Gdingen.

11) Para garantizar la eliminación de una sensación de amenaza por ambas partes para ambas ciudades portuarias, tanto Danzig como Gdingen tendrían el caracter de ciudad comercial, lo que se traduciría en no albergar fortificaciones militares ni equipamento militar.

12) La peninsula de Hel, independientemente de que se transfiriera a Polonia o Alemania, estaría igualmente desmilitarizada.

13) Dado que el Gobierno alemán ha presentado quejas violentas contra el tratamiento polaco de las minorías alemanas, y el gobierno polaco alega a su vez denuncias contra Alemania, ambas partes acuerdan que estas quejas serán sometidas a una comisión de investigación internacional, cuya tarea será investigar todas las quejas sobre daños económicos y físicos así como otros actos de terrorismo. Alemania y Polonia se comprometen a la compensación por los daños económicos o de otro tipo a las minorías de ambas partes para enmendar o anular las expropiaciones u otras acciones que afectasen a la víctimas.

14) Tanto a los alemanes residentes en Polonia como a los polacos residentes en Alemania, en aras del derecho internacional, no se les obligará a cometer actos contrarios a sus sentimientos nacionales y se les garantizará su nacionalidad como el libre uso de la misma. Ambas partes se comprometen a no enrolar a los miembros de las minorías en su servicio militar.

15) En caso de conformidad respecto a los puntos de esta propuesta, acordarían Polonia y Alemania la desmovilización inmediata de sus ejércitos.

16) Las medidas necesarias para la aceleración de los acuerdos anteriores y otras medidas adicionales se acordarán conjuntamente entre Alemania y Polonia.
Personalmente me parecen unos puntos de lo más justo... Inusualmente ecuánimes para alguien con semejante fama.

Para terminar esta chapa, sólo quedaría añadir que una guerra entre Polonia y Alemania no beneficiaría a ninguna de las partes implicadas ni al resto de Europa, en tanto en cuanto debilita la posición europea dando así cancha a la Unión Soviética que lo tendría más fácil para llegar a Lisboa al ver a sus enemigos divididos. Una relación simbiótica entre Polonia y Alemania sería 1) militarmente lo ideal para Europa ya que ambos países eran enemigos del bolchevismo y la Unión Soviética, y de esta manera se produciría una contención rusa. Todavía más si se mantuviera una alianza francoinglesa con Polonia. 2) comercialmente es igualmente beneficioso a nivel bilateral al ser países que comparten frontera. Vamos, que enrarecer y cargarse las relaciones entre Polonia y Alemania por unos territorios aquí o allá es del famoso y por desgracia común género simple, pero ante miopías nacionalistas e imperialistas poco hay que hacer, salvo que sea algo deliberado para provocar una guerra. En ese sentido, es conveniente mencionar (1) que Hitler sentía admiración por el mariscal Piłsudski y que las relaciones entre PL y DE entre 1933 y 1935 -fecha de la muerte de Piłsudski- estaban en su mejor momento, (2) el uso inglés de Polonia para darles su casus belli contra Alemania por motivos económicos -le hacía la competencia, básicamente-, con la manipulación en las mediaciones y torpedeos de los acuerdos, el convencimiento de que Alemania no era tan fuerte y que Polonia podría llegar a Berlín en una semana, y sobre todo por prometerles una ayuda militar que nunca llegó dejándoles con el trastero al aire.

Aún más hilarante -o sospechoso según se elija-, es la intención de UK de quitarse de encima a un competidor para terminar al final de la guerra en una situación mucho peor de la que se estaba inicialmente o se podría estar, perdiendo por completo toda la hegomonía que otrora se tuvo. En ese plan, ¿Cui bono? Enfundándome y ajustando con cuidado el gorro de papel albal, es un hecho que el gran beneficiado fue EEUU, nada nuevo al no librarse la guerra en su suelo, pero lo interesante no es del todo eso sino que EEUU por aquel entonces era el país del mundo donde más judíos residían. Casi el 40-45% del total mundial. Por no hablar de la creación del estado de Israel y otras tantas prebendas concedidas al sionismo, aunque bueno, el tema no es el final de la SGM sino su inicio, que me voy por las ramas. Sería bueno un hilo exclusivo donde debatir eso, si alguien se anima a abrirlo.
 
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Leovigildo

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Incorrecto. Las reclamaciones de Marzo eran las mismas que las de Octubre de 1938. Nada había cambiado.
Se intensifican en el sentido de que se insiste más en ello, no en que añadan extras a lo demandado. En cualquier caso, toda corrección y adición es bienvenida. Edito y añado al post anterior.
 

Ulisses

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Leovigildo

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Omitiendo una errata grave donde dice 1938 y debería ser 1933, el resto se deja leer. Poco a poco va sabiéndose más y más los verdaderos motivos de la SGM:

http://www.voltairenet.org/article187569.html

Banqueros anglosajones organizaron la Segunda Guerra Mundial
por Valentin Katasonov


En ocasión del 70º aniversario de la Victoria sobre el nazismo publicamos un estudio de Valentín Katasonov sobre el financiamiento del partido nancy y el rearme del III Reich. El autor se basa en documentos publicados en 2012 que confirman que banqueros estadounidenses y británicos organizaron la Segunda Guerra Mundial, con la complicidad del presidente de Estados Unidos Franklin Roosevelt y del primer ministro británico Neville Chamberlain y con la esperanza de acabar con la Unión Soviética. Este estudio sugiere una serie de interrogantes que serán objeto de un próximo artículo.

La Segunda Guerra Mundial no fue provocada por un rabioso Fuhrer que se había apoderado de Alemania. La Segunda Guerra Mundial es obra de una oligarquía mundial, o más exactamente de los plutócratas anglo-estadounidenses.

Utilizando instrumentos como la Reserva Federal de Estados Unidos y el Banco de Inglaterra, esos elementos comenzaron a preparar el siguiente conflicto de envergadura planetaria inmediatamente después de la Primera Guerra Mundial. Su blanco era la Unión Soviética.

Los planes Dawes y Young, la creación del Banco de Pagos Internacionales (BPI) [1], la suspensión del pago por parte de Alemania de las reparaciones de guerra previstas en el Tratado de Versalles y la aceptación de aquella decisión por los ex aliados de Rusia, las masivas inversiones extranjeras en la economía del III Reich, la militarización de la economía alemana y las violaciones del Tratado de Versalles son etapas en el camino que conduce a la guerra.

Detrás de aquel complot se hallaban personajes claves: los Rockefeller, los Morgan, Lord Montagu Norman (gobernador del Banco de Inglaterra) y Hjalmar Schacht (presidente del Reichsbank y ministro de Economía del gobierno de Hitler). El programa estratégico de los Rockefeller y los Morgan era sojuzgar Europa económicamente, saturar Alemania de inversiones y créditos extranjeros y empujarla a asestar un golpe mortal a la Rusia soviética para que esta última volviese al capitalismo, en calidad de colonia.

Montagu Norman (1871-1950) desempeñó un papel importante como intermediario en el diálogo entre los medios financieros estadounidenses y los jefes de empresas alemanas. Hjalmar Schacht organizó la reconstrucción del sector vinculado a la defensa en la economía alemana. La operación de los plutócratas contaba con la cobertura que le ofrecían políticos como Franklin Roosevelt, Neville Chamberlain y Winston Churchill. En Alemania los ejecutores de aquellos proyectos eran Hitler y Hjalmar Schacht. Según varios historiadores, Hjalmar Schacht desempeñó un papel más importante que Hitler, pero se mantenía en la sombra.

Al término de la Primera Guerra Mundial, el Plan Dawes tenía como objetivo comprometer la Triple Entente y cobrar las reparaciones de guerra que debía pagar Alemania. El Plan Daves –propuesto por el Comité presidido por Charles G. Dawes– designaba un intento realizado en 1924 por resolver el problema de las reparaciones de guerra, que estaba minando la política internacional desde el fin de la Primera Guerra Mundial y la firma del Tratado de Versalles –reticente, Francia cobró más del 50% del monto de las reparaciones. Entre 1924 y 1929, Alemania recibió 2 500 millones de dólares de Estados Unidos y 1 500 millones de Gran Bretaña en el marco del Plan Dawes. Son sumas considerables que corresponden a 1 000 millardos [2] de dólares actuales

Hjalmar Schacht desempeñó un papel activo en la aplicación del Plan Dawes. En 1929, resumió los resultados del plan declarando que Alemania había recibido en 5 años más préstamos extranjeros que Estados Unidos en los 40 años anteriores a la Primera Guerra Mundial. Por consiguiente, en 1929, Alemania se había convertido en la segunda potencia industrial a nivel mundial, por delante de Gran Bretaña.

Durante los años 1930, Alemania siguió obteniendo inversiones y préstamos. Redactado en 1929 y adoptado oficialmente en 1930, el denominado Plan Dawes era un programa tendiente a garantizar el pago de las deudas de guerra que Alemania debía pagar al término de la Primera Guerra Mundial. Fue presentado por el comité presidido (de 1929 a 1930) por el industrial estadounidense Owen D. Young, fundador y primer presidente de la RCA (Radio Corporation of America). En aquella época, Young era también miembro del consejo de administración de la Fundación Rockefeller y había sido, además, uno de los representantes implicados en un dispositivo de rediseño de las reparaciones de guerra, el Plan Dawes de 1924.

Según el plan, el Banco de Pagos Internacionales (BPI) fue creado en 1930 para que Alemania pagase las reparaciones a los vencedores. En realidad, el dinero tomó un camino muy diferente: salió de Estados Unidos y Gran Bretaña para aterrizar en Alemania.

El capital de la mayoría de las empresas alemanas estratégicamente importantes era, parcial o completamente, estadounidense. Una parte estaba bajo control de los inversionistas británicos. Los sectores como las refinerías de petróleo y el proceso de licuefacción de carbón de la economía alemana estaban en manos de Standard Oil, perteneciente a los Rockefeller. El gigante de la industria química Farbenindustrie AG pasó al control del grupo Morgan. Un 40% de la red telefónica y un 30% de las acciones de Focke Wulf se hallaban bajo control de la firma estadounidense ITT. La radio y los gigantes de la industria eléctrica AEG, Siemens y Osram pasaron al control de General Electric, de Estados Unidos. ITT y General Electric eran parte del imperio Morgan. El 100% de las acciones de Volkswagen pertenecía a Ford, también de Estados Unidos.

En el momento de la llegada de Hitler al poder, el capital financiero estadounidense controlaba, como vemos, prácticamente todos los sectores de importancia estratégica de la industria alemana –refinerías de petróleo, producción de combustible líquido a partir del carbón, química, construcción de vehículos automotores, ingeniería eléctrica, radio– así como gran parte de la industria de construcción mecánica (278 empresas en total). Los grandes bancos alemanes, como el Deutsche Bank, el Dresdner Bank, el Donat Bank y otros, se hallaban bajo control estadounidense.

El 30 de enero de 1938, Hitler se convertía en canciller de Alemania. Pero antes, los banqueros estadounidenses habían estudiado muy cuidadosamente su candidatura. Hjalmar Schacht había viajado a Estados Unidos durante el otoño de 1930 para hablar de aquella nominación con varios colegas estadounidenses. La designación de Hitler fue aprobada finalmente durante una reunión secreta de personalidades de las finanzas en Estados Unidos. En 1932, Schacht pasó todo el año convenciendo a los banqueros alemanes de que el mejor candidato al cargo de canciller era Hitler. Y lo logró.

A mediados de noviembre de 1932, 17 de los más poderosos banqueros e industriales alemanes dirigieron al presidente Hindenburg una carta exigiéndole que nombrara canciller a Hitler. La última reunión de trabajo de los financieros alemanes previa a la elección tuvo lugar el 4 de enero de 1933 en Colonia, en la residencia del banquero Kurt von Schroder. El partido nancy llegó al poder inmediatamente después. Las relaciones financieras y económicas de Alemania con los anglosajones se hicieron entonces aún más estrechas.

Hitler anunció inmediatamente su negativa a pagar las reparaciones de guerra. Puso en duda que Inglaterra y Francia pudiesen pagar sus propias deudas, acumuladas durante la Primera Guerra Mundial, a Estados Unidos. Se reunió con el presidente Franklin Roosevelt y con los grandes banqueros estadounidenses para pedir una línea de crédito por 1 000 millones de dólares.

En junio del mismo año, Hjalmar Schacht viajó a Londres para entrevistarse con Montagu Norman. Los británicos accedieron a conceder un préstamo de 2 000 millones de dólares. No pusieron ninguna objeción en cuanto a la decisión de Alemania de suspender el pago de su deuda.

Según algunos historiadores, Estados Unidos y Gran Bretaña se mostraron tan complacientes porque, desde 1932, la Unión Soviética había implementado su plan quinquenal de desarrollo económico tendiente a alcanzar nuevas metas como potencia industrial. En el sector de la industria pesada habían surgido miles de empresas y la dependencia de la URSS en materia de importación de productos industriales había disminuido considerablemente. Como consecuencia de ello, las posibilidades de estrangular económicamente a la Unión Soviética se habían reducido prácticamente a cero. Se decidió entonces recurrir a la guerra y, en función de ese objetivo, emprender la militarización acelerada de Alemania.

Para esta última, la obtención de créditos en Estados Unidos no presentaba prácticamente ningún problema. Hitler había llegado al poder en Alemania casi al mismo tiempo que Franklin Roosevelt en Estados Unidos. Los banqueros que apoyaron a Hitler en 1931 son precisamente los mismos que apoyaron la elección de Roosevelt. Ya en el cargo, el nuevo presidente no podía hacer otra cosa que conceder generosos créditos a Alemania. Por cierto, muchos notaron la gran similitud entre el New Deal de Roosevelt y la política económica del III Reich. No había en ello nada sorprendente ya que eran los mismos quienes estaban garantizando con sus consejos el salvamento de los dos gobiernos. Y representaban principalmente los medios financieros estadounidenses.

El New Deal de Roosevelt no tardó presentar problemas. En 1937, Estados Unidos se hundía en la crisis económica. En 1939, la economía estadounidense funcionaba a un 33% de su capacidad industrial (19% en los peores momentos de la crisis registrada de 1929 a 1933).

Rexford G. Tugwell, un economista del primer Brain Trust, un equipo de académicos de la Universidad de Columbia creado por Franklin Roosevelt y que contribuyó a las recomendaciones políticas que condujeron al New Deal de ese presidente, escribía en 1939 que la administración había fracasado. La situación se mantuvo sin cambios hasta que Hitler invadió Polonia. Sólo los poderosos vientos de la guerra podían disipar la bruma. Todas las iniciativa de Roosevelt estaban condenadas al fracaso [3]. Lo único que podía salvar el capitalismo estadounidense era una guerra mundial. En 1939, los plutócratas recurrieron a todos los medios a su disposición para presionar a Hitler e incitarlo a desatar una guerra a gran escala en el este de Europa.

El ya mencionado Banco de Pagos Internacionales (BPI) tuvo un papel importante en la Segunda Guerra Mundial. Verdadera cabeza de playa de los intereses estadounidenses en Europa, el BPI garantizaba el vínculo de las empresas de Estados Unidos y Gran Bretaña con las empresas alemanas. Era una especie de zona franca que protegía al capital cosmopolita ante iniciativas políticas, guerras, sanciones, etc.

El Banco de Pagos Internacionales se creó bajo la forma de una entidad comercial pública. Su inmunidad ante interferencias gubernamentales y, por ejemplo, los impuestos, estaba garantizada por el acuerdo internacional firmado en La Haya, en 1930.

Los banqueros de la Reserva Federal de Nueva York –muy vinculados a Morgan, a Montagu Norman (gobernador del Banco de Inglaterra) y a los financieros alemanes como Hjalmar Schacht (de quien ya hemos precisado que fue presidente del Reichsbank y ministro de Economía del gobierno de Hitler), Walther Funk (quien sustituyó a Hjalmar Schacht como presidente del Reichsbank) y Emil Puhl– desempeñaron todos un papel importante en la fundación del BPI. Entre sus fundadores figuraban los bancos centrales de Gran Bretaña, Francia, Italia, Alemania y Bélgica, así como algunos bancos privados.

El Banco Federal de Nueva York hizo lo mejor que pudo, pero no estuvo entre los establecimientos fundadores del BPI. Estados Unidos estaba representado por First National Bank of New York, J.P. Morgan and Company, First National Bank of Chicago, pertenecientes todos al imperio Morgan. Japón también estuvo representado por bancos privados. En 1931-1932, 19 bancos centrales europeos se unían al Banco de Pagos Internacionales. Gates W. McGarrah, banquero del clan Rockefeller, fue el primer presidente del consejo de administración del BPI. Luego fue reemplazado por León Fraser, representante del clan Morgan. Durante la guerra, el presidente del BPI fue Thomas H. McKittrick, de Estados Unidos.

Mucho se ha escrito sobre las actividades del BPI al servicio de los intereses del III Reich. Entre otras cosas, estuvo implicado en transacciones con diferentes países, inclusive aquellos con los que Alemania estaba en guerra.

Después de Pearl Harbor, el Banco de Pagos Internacionales actuaba como corresponsal de la Federal Reserve Bank de Nueva York. Y durante la guerra estuvo bajo control de los nazis, a pesar de que su presidente era el estadounidense Thomas Huntington McKittrick. Mientras los soldados morían en los campos de batalla, la dirección del BPI se reunía en Basilea con los banqueros de Alemania, Japón, Italia, Bélgica, Gran Bretaña y Estados Unidos. Los representantes de las potencias beligerantes trabajaban tranquilamente, en un clima de comprensión mutua, en el oasis de paz suizo.

Fue en Suiza donde Alemania depositó, para mantenerlo a buen recaudo, el oro del que se había apoderado en los cuatro puntos cardinales de Europa. En marzo de 1938, cuando Hitler se apoderó de Viena, parte del oro de Austria había sido transferido a las cajas fuertes del BPI. Lo mismo había sucedido con el oro del Banco Nacional checoeslovaco (48 millones de dólares). Cuando estalló la guerra, el oro entraba constantemente al Banco de Pagos Internacionales. Alemania lo obtenía en los campos de concentración y mediante el saqueo de los países ocupados –incluyendo todo lo que pertenecía a los civiles: joyas, cigarreras, utensilios de todo tipo… dientes de oro. Fue todo eso lo que se ha dado en llamar “el oro nancy”. Se fundía en lingotes para almacenarlo en el Banco de Pagos Internacionales, en Suiza o fuera de Europa.

En su libro Trading With The Enemy: An Expose of The nancy-American Money Plot 1933-1949, Charles Higham escribe que durante la Guerra los nazis transfirieron 378 millones de dólares a las cuentas del Banco de Pagos Internacionales.

Es importante mencionar el oro de Checoeslovaquia. Algunas informaciones han salido a la luz después de la apertura de los archivos del Banco de Inglaterra, en 2012, [4]. En marzo de 1939, Alemania ocupaba Praga. Los nazis exigieron 48 millones de dólares de las reservas nacionales de oro. Se les respondió que aquella suma ya había sido transferida al Banco de Pagos Internacionales. Por orden de Berlín, el oro fue transferido a la cuenta del Reichsbank en el mismo Banco de Pagos Internacionales. Posteriormente, el Banco de Inglaterra estuvo implicado en las transacciones efectuadas por orden del Reichsbank al Banco de Pagos Internacionales. Aquellas órdenes se retransmitían a Londres. Por consiguiente, hubo complicidad entre el Reichsbank alemán, el Banco de Pagos Internacionales y el Banco de Inglaterra. En 1939 estalló un escándalo en Gran Bretaña cuando se supo que el Banco de Inglaterra ejecutaba las transacciones con oro checo según las órdenes no del gobierno checo sino de Berlín o de Basilea. Por ejemplo, en junio de 1939, 3 meses antes del inicio de la guerra entre Gran Bretaña y Alemania, el Banco de Inglaterra ayudó a los nazis a transferir hacia la cuenta de Alemania el oro equivalente a 440 000 libras esterlinas y a enviar parte del oro a Nueva York -Alemania garantizaba así la neutralidad de Estados Unidos en caso de intervención alemana en Polonia.

Aquellas transacciones ilegales con oro checo se realizaron con el acuerdo tácito del gobierno de Gran Bretaña, que estaba perfectamente al corriente de lo que estaba sucediendo. El primer ministro británico Neville Chamberlain, el ministro de Finanzas sir John Simon y los demás responsables británicos de alto rango hicieron todo lo posible por ocultar la verdad, recurriendo incluso a la mentira más descarada al afirmar que el oro había sido restituido a su legítimo propietario o que nunca había sido transferido al Reichsbank.

Los documentos del Banco de Inglaterra publicados últimamente revelan los hechos y demuestran que los responsables gubernamentales mintieron, para protegerse a sí mismos y para encubrir las actividades del Banco de Inglaterra y del Banco de Pagos Internacionales. La coordinación de aquellas actividades criminales era un juego de niños ya que el director del Banco de Inglaterra Montagu Norman también presidía el Consejo de Administración del Banco de Pagos Internacionales. Por cierto, Montagu Norman nunca disimuló su simpatía por los fascistas.

La Conferencia de Bretton Woods –oficialmente Conferencia Monetaria y Financiera de las Naciones Unidas– reunió a los 730 delegados de los 44 países aliados en el hotel Mount Washington, en Bretton Woods (New Hampshire), Estados Unidos, con vista a regular la vida monetaria y financiera internacional al término de la Segunda Guerra Mundial. Esta conferencia se desarrolló del 1º al 22 de julio de 1944. El Banco de Pagos Internacionales se veía repentinamente bajo los proyectores. Se decía que había colaborado con la Alemania fascista. Sin entrar en detalles, me limitaré a decir que después de una serie de peripecias –algunos delegados estadounidenses se opusieron a la moción– los delegados coincidieron en que había que cerrar el BPI. Aquella decisión de la conferencia internacional nunca llegó a aplicarse. Se enterró todo lo que podía desacreditar las actividades del BPI durante la Segunda Guerra Mundial. Lo cual contribuye, aún hoy en día, a falsear la historia de la Segunda Guerra Mundial.

Para terminar, vale la pena decir unas palabras sobre Hjalmar Schacht (1877-1970), el ex presidente del Reichsbank y ministro de Economía del gobierno fascista de Alemania. En 1945, Schacht jue juzgado en Núremberg pero resultó absuelto el 1º de octubre de 1946. Así escapaba a las acusaciones de asesinato.

Por razones que nunca han sido explicadas, Hjalmar Schacht no figuraba en la lista de los principales criminales de guerra de 1945. Lo más interesante es que volvió a su vida profesional como si no hubiese sucedido nada y fundó la firma Schacht GmbH en Dusseldorf. Este detalle puede parecer insignificante. Pero confirma una vez más que los plutócratas anglo-estadounidenses y sus representantes plenipotenciarios en Alemania habían preparado y, en cierta medida, influido en todo el proceso de la Segunda Guerra Mundial.

Ahora los plutócratas quieren reescribir la historia de la Segunda Guerra Mundial y modificar además sus resultados.
 

Snowball

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1- Renania (y Baviera) fueron invadidas en su día ilegalmente, incumpliendo los términos del Armisticio de Compiégne. Los países de la antigua Entente se habían compromeNtido en Compiégne a "no llevar a cabo una política de anexiones" y habían solemnemente declarado que "ningún territorio será separado de otro si no es con la expresa voluntad y aquiescencia de sus habitantes". El principio de autodeterminación de los Puntos de Wilson y de la Sociedad de Naciones fue pasado por el forro: Francia se anexionó ilegalmente Alsacia y Lorena sin consultar a sus habitantes, Bélgica se incorporó las comarcas de Eupen, Moresnet, Malmedy y St. Vith de forma similar. De las burradas fronterizas que se hicieron en Europa del Este y en la frontera danesa, violando todo derecho internacional, mejor me callo. Y sobre el reparto del imperio colonial alemán, realizado sin consultar democráticamente ni a los alemanes ni a los indígenas, también. Alemania tuvo que entregar toda su flota mercante a UK, y toda su flota militar también :tragatochos: Francia, en su zona de ocupación, desmantela y se lleva todo tipo de industrias, cientos de fábricas enteras… y todo lo que no puede llevarse lo destruye. Los bienes alemanes en el extranjero son confiscados y las patentes alemanas, saqueadas, igual que muchas obras de arte. Alemania aceptó esta política de hechos consumados sólo porque había sido bloqueada comercial y marítimamente, amenazada con una hambruna y traicionada desde dentro por sus propios diplomáticos y los movimientos subversivos, con lo cual el arquetipo famoso de la "puñalada por la espalda" al frontsoldat, está plenamente justificado.

Todo esto lo hacían unos incompetentes militares que nunca derrotaron al ejército alemán (los alemanes lucharon en todo momento fuera de sus fronteras, en territorio enemigo)… y violando sus propios tratados. Al menos Bismarck el siglo pasado había llegado a tomar la mismísima París antes de imponer unas (muy reducidas) reparaciones a Francia.

2- Renania (aclaración: zona industrial de Essen incluida, el Ruhr, Dusseldorff, Bochum, Munster, Dortmund, etc. fue ocupada, unilateralmente, por tropas francesas, desde 1918 hasta 1920 y luego en 1923, en dos incursiones de latrocinio y saqueo que sir John Simon, el ministro ukano de asuntos exteriores, calificó como "piratería". Francia sólo quería controlar la producción de acero y obtener espacio defensivo y estratégico. No contenta con eso, se dedicó a meter tropas coloniales subsaharianas y procedió a una oleada de detenciones arbitrarias que desataron el pánico, el nacionalismo alemán y las críticas del mundo entero, ante las cuales Francia optó por retirarse… llevándose cantidades indecentes de carbón, hierro, acero e instalaciones industriales desmanteladas.

3- La obligación de devolver Renania a Alemania estaba contenida en el Tratado de Versalles, pero incluso después de los tratados de Locarno y del Pacto Briand-Kellog, las tropas de ocupación extranjeras continuaban estacionadas en Renania. Renania fue devuelta a Alemania sin coacción alguna en 1930.

4- Alemania decidió remilitarizar Renania porque Francia violó el Pacto de Locarno firmando un tratado con la URSS. Por esta violación, Alemania se consideró desligada del pacto y procedió a la remilitarización simbólica (y pacífica, sin pegar ni un solo tiro, porque la población era alemana y pro-alemana) de Renania. Mucha gente (no-alemana, claro) puso el grito en el cielo, pero los mismos que se rasgaban las vestiduras no dijeron ni mu cuando la URSS se cargó Polonia (1921-22), los países bálticos, Ucrania, Bielorrusia, el Cáucaso, Asia Central… De las burradas ukanas en Irlanda e India tampoco dijeron nada. Ni de la guerra del Chaco entre Bolivia y Paraguay. Hipocresía diplomática de la peor clase, Alemania nos preocupa mucho cuando toma el control de un territorio alemán :roto2: pero la URSS es cojonuda cuando se carga territorios que no son suyos. A Alemania no le permitimos tener fuerza aérea, pero a Lituania le dejamos tener 150 aviones de combate y 60 bombarderos. Y a la URSS pues no solo le permitimos tener todo eso y más, sino que la ayudamos directamente a tenerlo (ayudas de Dawes & Young, Averell Harrimann, el pacto de Rapallo, poniendo los recursos de Alemania al servicio de la modernización de la Unión Soviética...


5- El conflicto con Alemania era impopular en Francia e impopular en Europa. Toda Europa sabía que el Tratado de Versalles era una burrada geopolítica abocada al desastre y destinada a engendrar conflicto, reconocido por el mismo Clemenceau: "No se preocupen ustedes por su futuro militar. La paz que acabamos de firmar les garantiza diez años de conflictos en el centro de Europa" (Clemenceau, dirigiéndose a los cadetes de la academia militar de Saint Cyr). Hasta Wilson decía que Versalles era un "acto de venganza" y Stalin dijo que era "un tratado de repruebo y saqueo". Al Imperio Británico no le hizo ninguna gracia la ocupación de la Renania por parte de Francia porque Francia se hacía demasiado fuerte y Alemania demasiado débil, violando el "equilibrio de poderes" que Inglaterra siempre quiso en la Europa continental.

6- Si Francia hubiese hecho guerra en aquel momento, no hubiera más que aumentado el apoyo internacional a Alemania. A nadie le parecía bien que el obrero alemán trabajase para pagarle la estancia al soldado senegalés que se alojaba en su propia casa ¿A ti te parecería bien?


:XX: No seas ramplón. Un serbio masón y perteneciente a la Mano Negra asesinó al archiduque de Austria, y Austria-Hungría le declaró la guerra a Serbia porque ésta (presionada por la diplomacia anglofrancesa, una especie de Polonia in the making) se negó a tomar medidas contra la insurgencia nacionalista. Alemania era aliada de Austria-Hungría así que entró en la contienda con ella. A Francia y Reino Unido les vino de querida madre porque el ferrocarril Berlín-Bagdad amenazaba con explotar sus rutas e intereses, especialmente en Siria. Ahora bien, si quieres reducir este complejo escenario a un denominador común lo bastante digerible como para ser procesado por verdaderos cenutrios, al menos ten la decencia de resumirlo bien y de una forma no tendenciosa.


Disculpa, pero Alemania sí fue ocupada militarmente y sí fue desguazada, además de exprimida y saqueada gitanistamente. Por ejemplo, el asunto de las reparaciones se convertiría en un verdadero pilinguiclub político. En Reino Unido, el candidato Bonar Law prometió a sus electores que, si lo votaban a él, Alemania pagaría 400 mil millones de marcos-oro. Lloyd George subió la subasta a 480 mil millones de marcos-oro, lo cual obligó al fulastre de Bonar Law a ofrecer 500 mil millones. En Francia, Locheur llegó hasta los 800 mil millones. Simon Klotz, un señor judío que resultaba ser el ministro de finanzas de Poincaré en Francia, declaró simplemente que "Le boche payera tout".

Lo del carbón, ferrocarriles, maquinaria, alimentos, acero y patentes fue lo que tuvo que entregar Alemania para pagar sucesivamente cada prolongación del estado de Armisticio de 1918 a 1919. Una vergüenza y un saqueo es lo que fue el buitreamiento de Alemania tras la I Guerra Mundial, una guerra en la que Alemania no fue vencida militarmente, sino en la retaguardia por los bolcheviques y los diplomáticos traidores al país.

En el Armisticio de Compiégne se había acordado que aquello sería "una paz sin vencedores ni vencidos" y "sin contribuciones ni indemnizaciones". Mis cºjºnes, aquello quedó en papel mojado. El nuevo régimen político de Alemania estaba totalmente dispuesto a bajarse los pantalones (o mejor dicho, los pantalones del pueblo alemán) y enchufarse el regazo de la Entente hasta las vísceras. Los famosos y buenistas puntos de Wilson también fueron violados sin escrúpulos por la codicia de los "vencedores".

El 27 de abril de 1921, la comisión de reparaciones fijó al fin la cifra que Alemania debía pagar: 137,6 mil millones de marcos-oro. Vamos a ver… esta cifra era el cuádruple de las reservas de oro del mundo entero o la totalidad de los bienes alemanes de 1914. Era 34 veces mayor que las contribuciones francesas de 1871 (y eso que los alemanes realmente invadieron y vencieron a Francia y llegaron a ocupar París, los franceses de 1918 no habían llegado a invadir siquiera suelo alemán, los alemanes lucharon en todo momento fuera de su país). En aquella ocasión Bismarck sólo le había impuesto a Francia 4 mil millones, cifra que Francia, financiada por la banca rothschildiana, pudo pagar con relativa comodidad en 3 años.

Las incautaciones de la flota de guerra y comercial alemanas no se dedujeron de la cifra de reparaciones, ni el valor de las patentes robadas a Alemania, ni los 11 mil millones de marcos correspondientes a los bienes alemanes incautados en el extranjero, ni los cientos de industrias desmanteladas por los franceses en el Ruhr, ni el saqueo de obras de arte, ni los bienes con los que pagó Alemania para prorrogar el Armisticio. No, todo esto se clasificó como reparaciones especiales. Tampoco se contaba conque se obligó a Alemania, violando los principios de la Sociedad de Naciones, a aceptar el control extranjero de la navegación en los ríos Oder, Elba, Wesser y Rhin. De la adjudicación de territorios indiscutiblemente alemanes a otros países, o de la abominación geopolítica fermentada alrededor de Danzig, mejor no hablar, el mapa político europeo resultante de Versalles todavía pone los pelos de punta hoy en día.

Alemania se negó a reconocer la deuda. La respuesta de la Entente fue que en tal caso, las armadas anglofrancesas reanudarían el bloqueo marítimo y la ocupación de los ejércitos extranjeros en Alemania se prolongaría indefinidamente. Ocupación cuyos gastos, por cierto, también eran pagados por Alemania: ya lo he dicho, el alemán trabajaba para pagarle el sueldo al soldado senegalés que se alojaba en su propia casa. De este estado de cosas no podía salir nada bueno.

En 1918, la Reichswehr era invicta en los campos de batalla pero en 1919 la situación era otra. El Tratado de Versalles sólo lo firmó Alemania bajo la presión del bloqueo marítimo-hambruna, la ocupación militar extranjera, las insurrecciones bolcheviques a las que el Ejército tenía que dedicarles toda su atención (incluso intervino en las repúblcias bálticas contra el bolchevismo, hasta que la Entente protestó :rolleye:) y, sobre todo, la traición de los políticos de Weimar, todos ellos relacionados con la Alta Finanza y el bolchevismo.

Así que, en estas condiciones, que Hitler decidiese anular el tema y hacer simpa tampoco me parece nada del otro mundo. Aparte de que, el Tratado de Versalles, los primeros en violarlo fueron precisamente los miembros de la antigua Entente, negándose a desarmarse mientras Alemania sí lo hacía y negándose a aplicarles a Austria, el Tirol del Sur, los Sudetes, Alta Silesia, Posnania, Pomerelia, etc., el derecho a la libre determinación. Así que en un discurso del Reichstag el 30 de enero de 1937, Hitler aniquila el artículo 231 del Tratado de Versalles (culpabilidad alemana en el desencadenamiento de la I Guerra Mundial), que no era más que la tapadera "moralizante" para expoliar económicamente a Alemania. Dijo Hitler "Retiro solemnemente la firma de una declaración prestada bajo presión y chantaje, y en contra de su mejor entendimiento, por un Gobierno alemán débil, en cuanto a que la culpa de la pasada guerra corresponde a Alemania". De modo que ahí quedaron anuladas las deudas y reparaciones, el control aliado de las vías fluviales y la comisión aliada de control en el Reichsbank. Ninguna potencia aliada elevó la menor protesta diplomática, todos parecían entender que aquella era una situación transitoria que no podía durar para siempre y que tarde o temprano Alemania volvería a estar en condiciones de tratar de tú a tú con el resto de capullos del mundo. Sólo la prensa francesa dijo alguna paridilla de que Alemania había retirado su firma de un acuerdo mutuo.

Ahora bien, si lo que pretendes decir es que tanto la ocupación como el desguazamiento hubieran debido ser mayores, decirte que es una afirmación gratuita (aparte de germanófoba a saco)… desmantelamos un país entero porque sí, porque lo decido yo desde mi sillón aporreando un teclado :D Es como si yo digo que los bielorrusos se merecían las represiones de las SS… pues vale. Probablemente a las potencias ganadoras les habría gustado mucho desguazar Alemania, pero sabían perfectamente que había ciertos límites. Alemania no era una nación desguazable así como así…


La verdadera causa de la 2GM fue Versalles. No lo digo yo, lo dijo Lloyd George, primer ministro ukano que algo sabría del tema:

No puedo imaginarme otro motivo más poderoso para una futura guerra, que rodear al pueblo alemán de una serie de pequeños neo-estados, muchos de los cuales están constituidos por pueblos que jamás han podido tener un gobierno estable, pero que incluyen una gran población alemana que exige su unión a la madre patria. La proposición de la comisión polaca de someter varios millones de alemanes a la vigilancia de un pueblo, como el polaco, que profesa otra religión, y que hace cerca de trescientos años que no ha tenido una soberanía independiente, conducirá, en mi opinión, más pronto o más tarde, a una nueva guerra en el Este de Europa.

Por no mencionar que, en Europa, mucho peor que el crack del 29 fue la quiebra, en 1931, del banco rothschildiano Creditansalt-Bankverein:


Ahora, si queremos ser más papistas que el Papa y pensar que los malvados boches se merecían todo eso porque clavaban neonatos en bayonetas, pues tú mismo.


Wishful thinking y estrategia de sofá :XX: Tú eres un verdadero y auténtico iletrado y analfabeto que agrede el teclado sin controlar del tema, porque escucha campanas y no sabe dónde. Un ignorante que repite los lugares comunes más manidos y los juicios y opiniones (que no datos) que él considera fiables por ser los más manoseados. La Entente no llegó a Berlín, no porque no quisiera, sino porque no pudo. Mírate un mapa de las líneas de frente en 1918 melón, Alemania estaba preparando una megaofensiva sobre París cuanto estalló el motín comunista y advino la claudicación diplomática. Incluso así, que un país invicto en el campo de batalla tragase tanta leche como la que tragó Alemania tras 1918, no tiene parangón en la Historia.

Alemania llegó a París en 1871 y ni la deuda ni las condiciones impuestas fueron de lejos tan onerosas. Si predicas otra cosa para con Alemania es simplemente por tus prejuicios germanófobos, que te tienen secuestrado. Y por culpa de ideas aberrantes, revanchistas y resentidas como ésas, surgen los Hitlers, los nacionalismos, etc. Leovigildo te ha dado un auténtico palizón en este jilo, pero tú no pareces darte por aludido. Ni siquiera le das las gracias por la cantidad de cosas y datos que te ha enseñado y que tú, es obvio, no conocías ni de flay.


:XX: No hombre no, no digas paridas. Alemania no descubrió América por ello. Fue Esparta la primera en emplear el método, al abolir el valor del oro y adoptar una moneda infalsificable e inmanipulable: barras de hierro tratadas químicamente para que no se pudieran cortar y perdieran su ductilidad, marcadas para que no se pudieran falsificar, y lo bastante antiestéticas y pesadas para que su acumulación codiciosa no fuese fácil. Los revolucionarios usanos también adoptaron el patrón riqueza, Benjamin Franklin lo explica bien en sus referencias a las "colonial skriptures" (con c, no k). Fichte lo decía ya claramente. Alemania volvió a aplicarlo.

No, Alemania no inventó nada, simplemente hizo lo que nadie tenía los bemoles de hacer en aquel momento: cuestionar la validez del aparato especulativo abstracto adosado como una sanguijuela al aparato productivo real.


Ya vuelves a meter la gamba, vas a un ritmo de 40 cagadas por frase. La URSS nunca adoptó nada que se pareciese al patrón-riqueza. Tenía bancos endeudados con el extranjero, como el Ruskombank, y bancos centrales cuyo volumen de crédito emitido, a interés y con independencia de la riqueza real producida, determinaba el flujo de la economía. El dinero se inyectaba de arriba a abajo y estaba fuertemente basado en el oro, de hecho la URSS nos robó a los españoles nuestras reservas (y Francia otro tanto).


:XX: Completamente falso e inventado. En los años 30, antes de la 2GM, Alemania se había metido toda Europa del Este (salvo Polonia) en el bolsillo, todo lo que había entre el Báltico, el Mediterráneo y el Mar oscuro, sin pegar un solo tiro y ofreciendo a estos países precios mucho mayores que los que podían ofrecer el Imperio Británico, el Imperio Francés y ya no digamos la URSS (cuyo único argumento estratégico es que tenía el Ejército Rojo masificado en la frontera desprendiendo una siniestra presencia coactiva e intimidatoria).

Y eso va por ese puñetero lumbreras medio analfabeto de antes, que dice (contradiciéndose, porque su punto es que la economía alemana era un fracaso) que "Alemania aterrorizaba tanto con su éxito que todo el mundo se unía contra ella". Sí sí. Eslovaquia, Polonia, Yugoslavia, Rumanía, Bulgaria, Lituania, Letonia, Estonia y hasta Turquía y México estaban súper aterrorizadas con Alemania hoyga. En cambio la URSS les traía sin cuidado :XX:

El muy desconocido comercio alemán en Europa del Este (y Sudamérica y Turquía) antes de la 2GM puede verse aquí y en algunos mensajes míos subsiguientes:


De hecho, buena parte de los mensajes que dan inicio a este jilo en realidad lo que hacen es dejar claro que el comercio alemán era tan eficaz y tenía tanto éxito, que los usanos, ukanos, gabachos y urssanos estaban empezando a temer por sus monopolios ruines y planteándose seriamente hacer una conjura de los mediocres y fracasados (ver cifras de paro de EEUU en 1939 y compararlas con Alemania) contra el exitoso. Las opiniones de países como Yugoslavia, Rumanía, los bálticos, Hungría, etc., les traían sin cuidado. Los "vencedores" pagarán su poca falta de cultura perdiendo sus imperios coloniales tras la guerra.


Lenin estaba obsesionado con Alemania. Los urssanos ya intentaron sojuzgar Europa en 1921 con la (fracasada) invasión de Polonia (por cierto, en esta ocasión a nadie le importó una hez Polonia, salvo a Rumanía y Hungría, que la ayudaron... Francia y su aliado checoslovaco la dejaron tirada). Ilya Ehrenburg publicó "Trust, DE" en 1923, describiendo una invasión masiva y destrucción de Europa, patrocinada por millonarios. Stalin ya acariciaba la idea de invadir, no Alemania, sino Europa entera, en los años 30, y empezó a masificar tropas en sus fronteras en 1932. La URSS se adjudicó por la fruta cara Estonia, Letonia, Lituania, Bukovina y Besarabia antes de Barbarroja. Provocó un golpe de Estado ilegal en Belgrado, en compinchamiento con el Imperio Británico, para derrocar a un gobierno pro-alemán elegido democráticamente. Atacó Finlandia por la fruta cara. Cuando los malvados alemanes entraron al fin en el engendro bolchevique, la retirada soviética fue un desastre porque los soviets no tenían mapas de su propio territorio… sino de Prusia Oriental, Silesia, Austria… Los alemanes encontraron en los cuarteles urssanos maniquíes para prácticas de tiro, con uniformes alemanes. Todas las divisiones soviéticas, en el momento de Barbarroja, estaban en posición ofensiva, no defensiva. Hasta tenían toda una industria de tanques (no un arma defensiva precisamente), la mayor del mundo, que los alemanes no habían podido ni imaginar, una fuerza aérea moderna y el ejército de tierra más grande del mundo. En el Kremlin, cada vez que un general brindaba por una paz duradera con Alemania, Stalin lo ridiculizaba y luego hacía una apología de la guerra ofensiva. Guerra ofensiva que era la doctrina militar oficial del Ejército Rojo…

En vista de todo eso, había peña (el Estado Mayor alemán el primero) que consideraba que la URSS estaba a punto de invadir Alemania. Habrase visto tamaña conspiranoia :rolleye:

Resumiendo: lo dicho. Eres una nulidad en el tema y pretendes sentar cátedra con cuatro datos mal digeridos y a menudo falsos. No has leído una hez sobre el tema y pretendes que tu opinión sea respetable. Eres un ejemplo perfecto de lo que pasa cuando educas a un Homo sapiens muy por encima de las posibilidades de su cerebro: una indigestión de conocimientos.


Otro que tal lo baila. Perdone ustec señor, pero Polonia estaba envalentonada porque los anglofranceses (y los usanos por lo bajinis, con William C. Bullitt a la cabeza) habían garantizado su asistencia, pactando que invadirían Alemania por el oeste y diciéndoles a los polacos que ya había masificaciones de tropas aliadas en las fronteras francesas. La brutal limpieza étnica de alemanes en Polonia (que, no hay que olvidar, era un Estado completamente artificial y aberrante, donde solo la mitad de la población era étnicamente polaca, el resto eran alemanes, rutenos, lituanos, checos, judíos, bielorrusos…) demuestra que Polonia estaba muy confiada. Para colmo, la diplomacia polaca era regularmente vacilada por Londres y París, que la estaban utilizando como peón y casus belli. El alto mando polaco estaba convencido de que Alemania era un tigre de papel, que el gobierno nancy era impopular, que había hambre y descontento en Alemania y que en cuanto el ejército polaco se desmovilizase, habría un levantamiento antinazi en la mismísima Berlín :XX: y la gloriosa caballería polaca entraría desfilando bajo la puerta de Brandenburgo. Del rollo de:



Soprendentemente ¬¬ el apoyo ukano-francés no se produjo.


Perdone ustec de nuevo señor erudito de sillón, pero los Sudetes, Eslovaquia y Rutenia Transcarpática se pusieron voluntaria y alegremente bajo la protección de Alemania porque estaban hastalapolla del despotismo chauvinista del gobierno checo de Praga (un Estado militarista y peligroso, de obediencia francesa, que tenía el mayor presupuesto militar per capita del mundo y una fuerza aérea moderna), que tenía puteados a millones de alemanes, eslovacos, húngaros, ucranianos, polacos… La única "invadida" hasta cierto punto (sin pegar un solo tiro) fue la zona de Chequia, y hay que dejar claro que su presidente, Hacha, emitió un comunicado en el que confiaba el mando de Chequia a Alemania. Así que procura no hacer demagogia barata, que esto no es un plató de Tele5 donde todos los participantes han pasado los filtros progres e iletrados pertinentes.

También hay que decir que Polonia ya se había adjudicado por la feis la comarca checa de Teschen y nadie había puesto el grito en el cielo. Una anexión de Chequia mola mucho si es polaca pero no mola nada si es alemana. Una invasión de Polonia mola mucho si viene del Este pero es una abominación si viene del Oeste...
BRUTAL :Aplauso:

Si hasta en la gabacha serie-documental APOCALIPSIS, reconocen la toma de Renania de forma unilateral por parte de Francia por motivos de saqueo económico. Se ven imágenes de tropas coloniales dando palos a la población civil Alemana...
 

Mineroblanco

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El nazismo causó una guerra mundial, decenas de millones de muertes, la destrucción de Alemania y su ocupación por los vencedores. Fue un régimen asesino, que asesinó a millones de personas, por mucho que lo defiendan los nazis del foro. Que hicieran bien algunas cosas en su politica económica es como si alguien asesina a mil personas y después dice que es muy bueno porque ha dado una limosna a un pobre.